Opiniones a favor y en contra genera a senadores fronterizos y diputado, que la Organización de Estados Americanos (OEA) visite a Haití, se documente de la situación de la vecina nación y rinda un informe como sugirió el Gobierno dominicano a través de un comunicado.
Los congresistas de distintos partidos consideron que la OEA se ha parcializado e inclinado siempre a favorecer más al país vecino que a la RD.
El senador del Partido Fuerza del Pueblo por Pedernales, Dionis Sánchez, sostuvo que la OEA tradicionalmente ha estado muy inclinada, de manera que deja ver el “refajo”, cuando ambas naciones han tenido alguna diferencia. Por lo que debe jugar el papel de mediador y no inclinarse a un solo lado.
Asimismo, la opinión del diputado del Partido Revolucionario Moderno (PRM) Ramón Ceballos, coincide con la del senador de Pedernales, en cuanto a la imparcialidad de la OEA ante el conflicto.
“No tengo muchas esperanzas de ese organismo a que defina y decida situaciones. Porque nunca la OEA ha tomado una decisión que favorezca a República Dominicana”, sostuvo el legislador.
Mientras que, el senador de Montecristi, Ramón Antonio Pimentel, consideró que para él la mayoría de los organismos internacionales tienen esa parcialidad hacia el territorio haitiano, sin embargo dijo que es momento de abocarse al diálogo y buscar soluciones.
En tanto que, el senador del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) por Elías Piña, Yván Lorenzo, consideró que la OEA es un órgano importante que pudiera ayudar, en la condición de Luis Almagro de secretario general del organismo.
La República Dominicana apeló encarecidamente a la secretaría general de la Organización de Estados Americanos (OEA) interponer con urgencia sus buenos oficios, de acuerdo con el mandato establecido en su Carta, y en particular en su artículo 2 (C), con el objetivo de asegurar una solución pacífica de la presente controversia entre RD y Haití, por la construcción de un canal en Juana Méndez, para desviar agua del Río Masacre.
Asimismo el Gobierno dominicano solicitó al Secretario General visitar con urgencia la zona en cuestión, recabar la información pertinente y rendir un informe detallado al Consejo Permanente de la OEA, para su edificación sobre esta situación.
En adición, se reservó el derecho a recurrir a los demás órganos de la OEA o a cualquier otra instancia internacional relevante.
Agregó que a los dos Estados conviene un acuerdo, logrado a través del dialogo, para el aprovechamiento de las fuentes hidrográficas compartidas y que sea respetuoso del espíritu y la letra del Tratado de Paz, Amistad Perpetua y Arbitraje del 20 de febrero de 1929.