El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha firmado una ley federal que pone fin a la participación de su país en el Tratado sobre misiles de alcance medio y corto (INF, por sus siglas en inglés), del que EE.UU. se había retirado en febrero.
El texto, previamente presentado por el mismo Putin ante los legisladores rusos, oficialmente desliga al país de sus obligaciones en el tratado pero estipula que el jefe de Estado ruso podrá tomar una decisión sobre una reanudación del acuerdo.
Washington había acusado a la parte rusa de incumplir las normas de este acuerdo bilateral sin presentar alguna prueba de ello. Moscú ha negado los señalamientos y, por el contrario, ha acusado a la parte estadounidense de violar el pacto con sus misiles de crucero de alcance medio.
El Tratado INF ha sido considerado como uno de los cimientos del moderno régimen de supervisión y control para la no proliferación de armas nucleares. Tras su abandono, el presidente de EE.UU., Donald Trump, amenazó con reforzar el arsenal atómico de su país, mientras que Rusia alertó que esa decisión conllevaría una carrera armamentista con graves consecuencias globales.