
Según la psiquiatra y nutricionista de la Universidad de Harvard, Uma Naidoo, una dieta rica en vitaminas puede ayudar a mantener el cerebro joven y saludable, pues la misma depende en gran medida de la alimentación y entre los nutrientes esenciales, la vitamina B se destaca por su papel en la memoria, la concentración y la prevención del deterioro cognitivo.
El complejo B está compuesto por ocho tipos de vitaminas (B1, B2, B3, B5, B6, B7, B9 y B12), cada una con una función específica en el organismo, especialmente en el sistema nervioso.
Estas vitaminas ayudan a producir energía a partir de los alimentos, pero también protegen las neuronas, mejoran la comunicación celular y fortalecen el rendimiento cognitivo.
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La vitamina B1 (tiamina) es clave en el metabolismo de los nutrientes, lo que permite que el cerebro funcione de manera óptima. Una deficiencia de tiamina puede provocar problemas neurológicos a largo plazo.
Por otra parte, la vitamina B2 (riboflavina) contribuye al buen funcionamiento de las células cerebrales, mejora la memoria, la concentración y la claridad mental, y previene el deterioro cognitivo.
En cuanto a la vitamina B3 (niacina) participa en la conversión de los alimentos en energía, lo que permite el correcto funcionamiento del sistema nervioso y del cerebro.
A su vez, la vitamina B5 (ácido pantoténico) ayuda en la producción y descomposición de ácidos grasos, un proceso esencial, ya que el cerebro está compuesto en gran parte por grasas y agua.
La vitamina B6 (piridoxina) contribuye al desarrollo del cerebro, al mantenimiento del sistema nervioso y a la producción de neurotransmisores, fundamentales para la comunicación entre neuronas.
Mientras que la vitamina B7 (biotina) participa en reacciones metabólicas que regulan la comunicación celular, permitiendo que las señales en el cerebro sean rápidas y eficaces.
Por último, la vitamina B9 (ácido fólico o folato) es esencial para el funcionamiento adecuado del sistema nervioso y de los neurotransmisores, lo que impacta directamente en la memoria y el aprendizaje.
Por qué la vitamina B12 ayuda a combatir el envejecimiento del cerebro
La vitamina B12, también conocida como cobalamina, es un nutriente fundamental para el funcionamiento del sistema nervioso y el desarrollo del cerebro. Su papel es clave en la memoria, la concentración y la prevención del deterioro cognitivo.
Un estudio publicado en la revista médica Cureus encontró que la deficiencia de vitamina B12 está relacionada con problemas de memoria y un mayor riesgo de Alzheimer.
En la investigación, realizada con 202 participantes, el 84% de los pacientes mostró mejoría en sus síntomas de deterioro cognitivo tras tres meses de suplementación con vitamina B12.
Según la Escuela de Medicina de Harvard, la vitamina B12 es hidrosoluble, lo que significa que se disuelve en agua y no se almacena en grandes cantidades en el cuerpo. Su función principal es ayudar en el metabolismo de las proteínas, el mantenimiento de las células nerviosas y la producción de glóbulos rojos.
Cuando consumimos alimentos ricos en vitamina B12, esta se une a las proteínas presentes en los alimentos. Luego, en el estómago, el ácido clorhídrico y las enzimas la liberan y permiten que el cuerpo la absorba.
Para que esta absorción ocurra de manera efectiva, la vitamina B12 necesita combinarse con una proteína especial llamada factor intrínseco, que la transporta hasta el intestino delgado, donde finalmente es asimilada por el organismo.