Por: Ling Almánzar
Para el pastor Carlos Peña, excandidato presidencial y líder del partido Generación de Servidores (GenS), la reforma fiscal del Gobierno es “una estafa” y no es necesaria porque las autoridades han tomado unos 45 mil millones de dólares en préstamos y debieran tener recursos para cumplir sus compromisos.
Por tanto, llamó a la gente a unirse a los cacerolazos y otras protestas contra esa propuesta, sugirió que sea retirada del Congreso y advirtió que, si se aprobara, aumentaría bastante el desempleo y los jóvenes serían duramente afectados.
En los alrededores del Congreso Nacional, propuso que la nómina pública se recorte y vuelva a los niveles del 2020, señaló que los haitianos indocumentados (incluyendo a las parturientas) se llevan cada año 1,500 millones de dólares en atenciones médicas; planteó la reunificación de todas las direcciones de Compras y Contrataciones de las instituciones, para ahorrar así un 30% de recursos, al ser eliminados los sobornos, el testaferrato y el pago de comisiones.
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“Hay fuentes de más para recaudar esos fondos, que no sean las costillas y los bolsillos del pueblo dominicano”, aseguró.
Rechazó que se pretenda cobrarles impuestos a las iglesias, incluyendo el Itbis o IVA, el impuesto a la propiedad inmobiliaria y arbitrios municipales. Anunció que van a participar en las vistas públicas en el Congreso, en contra del proyecto.
