Rafael Nadal fue recibido con una ovación de pie por el público presente en la cancha Philippe Chatrier cuando pisó la arcilla roja el domingo para disputar su partido de individuales de primera ronda de los Juegos Olímpicos de París contra el húngaro Marton Fucsovics.
Es el mismo estadio donde Nadal ha ganado un récord de 14 títulos del Abierto de Francia, y hay una estatua del español afuera del recinto, donde los fanáticos se reunieron para tomarse fotos con la representación en acero del jugador. Saludó rápidamente al entrar durante las presentaciones previas al partido.
Cuando Nadal y Fucsovics empezaron a calentar, se oyeron gritos de “¡Ole!” y luego “¡Ra-fa! ¡Ra-fa!”.
Nadal, de 38 años, decidió el domingo que, efectivamente, jugará individuales en estos Juegos de Verano, además de dobles junto a Carlos Alcaraz, después de decir el sábado por la noche que no estaba seguro de si participaría en ambos eventos.
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Nadal ha lidiado con una serie de lesiones en las últimas dos temporadas, y su muslo derecho fue vendado el domingo, tal como lo estuvo durante su victoria de dobles de primera ronda el sábado por la noche.
El 22 veces campeón de Grand Slam dijo el sábado que quería consultar con su equipo antes de decidir qué hacer, y luego realizó una sesión de práctica el domingo por la mañana para comprobar su estado físico. Pero al final, optó por jugar también individuales, para el deleite de los espectadores que ondeaban banderas españolas rojas y amarillas en las gradas y usaban sus teléfonos para capturar recuerdos del momento.
Nadal y Alcaraz —la pareja de tenistas españoles que combina la antigua y la nueva— ganaron el primer partido que jugaron juntos como equipo de dobles, eliminando a los argentinos Máximo González y Andrés Molteni por 7-6 (4), 6-4. Unas 18 horas y media después, Nadal volvió a la cancha para enfrentarse a Fucsovics.
Nadal no ha aclarado si los Juegos de Verano serán el último evento de su legendaria carrera, aunque ha habido mucha especulación al respecto, dados todos sus recientes problemas de salud, incluida una operación en la cadera el año pasado. También tiene una conexión especial con Roland Garros, que albergará partidos de tenis en los Juegos Olímpicos de 2024 y es la sede del Abierto de Francia anual.
Cuando se le preguntó el sábado si estos Juegos Olímpicos podrían ser su último partido antes de retirarse, Nadal respondió: “Nunca he dicho eso. No lo sé”.
La participación de Nadal en los Juegos Olímpicos de 2024 en realidad comenzó el viernes por la noche, cuando fue el portador sorpresa de la antorcha durante la ceremonia de apertura.
Si Nadal, que ganó el oro olímpico en individuales en Pekín 2008 y en dobles con Marc López en Río de Janeiro 2016, vence a Fucsovics, el siguiente partido sería contra su viejo rival Novak Djokovic, que posee un récord masculino de 24 títulos de Grand Slam.
Nadie se ha enfrentado a Nadal más que Djokovic, uno de sus homólogos en el llamado Big Three del tenis masculino, en el que también figuraba el ahora retirado Roger Federer. Ha habido 59 enfrentamientos entre Nadal y Djokovic, más que entre cualquier otro par de hombres en la era de los Abiertos del tenis, que se remonta a 1968.
Djokovic lidera 30-29 en general, mientras que Nadal lidera 11-7 en partidos de Grand Slam, incluido 8-2 en Roland Garros.
“Jugar contra él es como una final para mí en cualquier torneo, particularmente aquí, sabiendo lo que ha logrado, lo que ha hecho por nuestro deporte, particularmente aquí en Roland Garros. Su récord habla por sí solo”, dijo Djokovic después de ganar su partido de primera ronda el sábado. “Estoy ansioso por jugar. Si nos enfrentamos, posiblemente será la última vez que nos enfrentemos en un gran escenario. Estoy seguro de que la gente lo disfrutará. Estoy ansioso por jugar”.
(AP)
