Cientos de rescatistas pudieron extraer 27 muertos de las ruinas tras un cuarto día de búsqueda de desaparecidos tras lluvias monzónicas provocaron un masivo alud en el oeste de la India, informaron el domingo autoridades.
Setenta y ocho personas siguen desaparecidas desde el alud en la aldea de Irshalwadi el miércoles en la noche en el distrito Raigadh, a unos 80 kilómetros (50 millas) de Mumbai, la capital del estado Maharashtra.
Por lo menos 17 de 48 viviendas en la aldea quedaron total o parcialmente sepultadas por los deslaves, dijeron autoridades.
Los rescatistas se valían de varas y palas hurgar entre el lodo. Llevar equipos pesados como excavadoras y tractores es imposible ya que no hay vías pavimentadas, expresó Deepak Avadh, un funcionario de la Agencia de Manejo de Desastres. Los rescatistas también usaban perros para olfatear por posibles sobrevivientes.
Desde la base de la montaña, tarda unos 90 minutos llegar a Irshalwadi a pie. Las lluvias y las amenazas de más aludes obligaron a suspender el operativo de rescate durante la noche, dijo la agencia de rescate.
Entre los muertos hay cuatro niños, reportó la agencia Press Trust of India, añadiendo que 75 personas han sido rescatadas. Cuatro personas han sido hospitalizadas.
La agencia meteorológica de la India colocó bajo alerta al estado Maharashtra debido a las incesantes lluvias. El servicio de trenes fue suspendido debido a que muchas estaciones y ferrovías están anegadas, reportó la prensa local.
Las lluvias monzónicas han matado a más de 100 personas en el norte de la India las últimas tres semanas, han estropeado vías y han causado el derrumbe de viviendas.
India suele sufrir fuertes inundaciones en la temporada monzónica, que va de junio a septiembre y le suministra al sudeste asiático la mayoría de todas las lluvias que recibe en el año. La lluvia es crucial para las cosechas pero a veces ocasiona graves daños.
Los científicos dicen que las lluvias monzónicas se están volviendo más erráticas debido al cambio climático, provocando inundaciones y deslaves en el norte de la India, en la región de Himalaya.
AP