Cinco candidatos latinoamericanos se disputan este domingo la presidencia del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) con un objetivo común, el de devolver a la institución el prestigio, dañado por su anterior presidente, Mauricio Claver-Carone.
Sin un candidato que parta como favorito, los propuestos por México, Chile, Brasil, Argentina y Trinidad y Tobago se someterán al escrutinio de la Asamblea de Gobernadores, formada por los 48 ministros de Economía y otras autoridades económicas de los países que integran el BID.
Los candidatos son Ilan Goldfajn, exgobernador del Banco Central de Brasil y hasta ahora jefe del Departamento del Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional (FMI); el exministro de Hacienda y de Educación de Chile Nicolás Eyzaguirre y Gerardo Esquivel, subgobernador del Banco de México (Banxico).
Completan la lista la argentina Cecilia Todesca, que fue vicejefa de Gabinete y, por parte de Trinidad y Tobago. Gerard Johnson, exfuncionario del BID que ahora trabaja como consultor del Ministerio de Finanzas de Jamaica.
Para resultar ganador, uno de ellos deberá obtener una mayoría del voto de los países miembros, cuyo poder varía según la cantidad de acciones que posee cada integrante del capital ordinario del BID. Estados Unidos tiene la mayor capacidad de voto, un 30%, seguido de Argentina y Brasil con un 11,3% y México, con el 7,2%.
Además, debe contar también con el respaldo de al menos 15 de los 28 países de la región.
Según establece el reglamento para la elección del banco, si durante la primera sesión de votación ningún candidato recibe la mayoría de votos establecida se harán sesiones sucesivas, según indica la agencia Efe.
Así, la primera votación se repetirá y, si no hay un ganador en la segunda ronda, se repetirá una tercera con los tres candidatos con mayor número de votos. Si tampoco se lograra, habrá una cuarta votación con los dos candidatos que obtengan más votos.
Aún así, podría cumplirse el escenario de que ninguno de los dos candidatos finales lograra la señalada mayoría en la cuarta votación.
En este caso, la presidenta de la Asamblea de Gobernadores (actualmente la hondureña Reina Irene Mejía, sustituta de Claver-Carone) determinará, en consulta con sus miembros, los procedimientos que deberán seguirse a continuación.
El ganador, que es elegido por un período de cinco años (y con posibilidad de ser reelegido una vez), sustituirá al estadounidense de origen cubano Mauricio Claver-Carone, que fue expulsado de la institución después de que una investigación demostrara que había tenido una relación amorosa con una subordinada, a la que le subió el sueldo en varias ocasiones.
Dejar atrás este asunto y recuperar el prestigio del banco de desarrollo es por tanto uno de los principales objetivos de los candidatos, según han explicado estos últimos días en varios eventos en los que han participado presentando su candidatura.
“Lo que tenemos que hacer es, en primer lugar, reconstruir la confianza y yo creo que esto tiene que pasar por el diálogo y el respeto”, apuntaba Gerardo Esquivel, el candidato presentado por México en un foro virtual organizado por el Center for Global Development.
En el mismo evento, el candidato brasileño, Ilan Goldfajn, indicaba que lo más necesario es hacer que el BID “vuelva a ser la institución multilateral más importante de la región” y para ello es necesario “un fuerte liderazgo” en un momento en el que “la moral está baja” en la institución.
El BID es la principal fuente de financiación para el desarrollo de América Latina y el Caribe y ofrece préstamos, donaciones y asistencia técnica a los países. Del total de 48 miembros, 26 de ellos son prestatarios.