El exmonarca Juan Carlos I envió a su hijo, el rey Felipe VI, una carta en la que informa que continuará viviendo “de forma permanente y estable” en Abu Dabi, pero que regresará a España “con frecuencia”.
La misiva, que la Casa Real dio a conocer este lunes pero tiene fecha del pasado 5 de marzo, llega apenas días después de que la Fiscalía General del Estado de España decidiera archivar las tres investigaciones que mantenía abiertas sobre el patrimonio del rey emérito.
En la carta, el exjefe de Estado, que está radicado en Abu Dabi desde agosto de 2020, dice que una vez que conoció la decisión de la Fiscalía, le parecía “oportuno” considerar su regreso a España, “aunque no de forma inmediata”.
“Prefiero, en este momento, por razones que pertenecen a mi ámbito privado y que solo a mí me afectan, continuar residiendo de forma permanente y estable en Abu Dabi, donde he encontrado tranquilidad, especialmente para este período de mi vida. Aunque, como es natural, volveré con frecuencia a España, a la que siempre llevo en el corazón, para visitar a la familia y amigos”, se lee en la misiva.
Asimismo, el exmonarca le comunicó a Felipe VI su voluntad de seguir fuera de la vida pública. “En este sentido, tanto en mis visitas como si en el futuro volviera a residir en España, es mi propósito organizar mi vida personal y mi lugar de residencia en ámbitos de carácter privado para continuar disfrutando de la mayor privacidad posible”, señala.
El exmonarca se dice consciente de la trascendencia para la opinión pública de los acontecimientos pasados de su vida privada y dice que se lamenta “sinceramente” por ellos, no obstante, también apunta que siente “un legítimo orgullo” por su contribución a la “convivencia democrática” y a las “libertades en España”.
La Casa Real informa que el rey Felipe VI “respeta y comprende” la voluntad de su padre.
Descartada la querella
La semana pasada, la Fiscalía de España informó sobre el archivo de todas las investigaciones sobre el patrimonio de Juan Carlos I, con lo que se descartó la presentación de una querella en su contra ante el Tribunal Supremo y se dan por cerradas las causas que indagaban en la fortuna que mantenía en el exterior oculta al fisco nacional.
Desde junio de 2018, el Ministerio Público ha podido conocer que el exjefe de Estado escondió al fisco al menos 77 millones de euros: 65 millones provenientes de Arabia Saudita; casi dos millones, regalo del Sultán de Baréin; y más de 10 millones ocultos en dos sociedades en paraísos fiscales.
Sin embargo, las pesquisas no han podido acreditar ni la cuantía ni el origen de su fortuna. Ni siquiera se han podido corroborar los dos principales hitos: por un lado, las sospechas de que hubiera recibido una millonaria comisión por la adjudicación del contrato para la construcción del tren de alta velocidad a La Meca; y por otro, el motivo por el que Arabia Saudita le habría hecho una donación de 100 millones de dólares, que acabarían en la cuenta corriente de su examante, Corinna Larsen.
Fuente: RT