SANTO DOMINGO.- “En un periodo de menos de cuatro años el país tendrá instalados 2,000 nuevos megavatios de potencia, sin que el Gobierno haya tenido que invertir o endeudarse con un solo peso, para la construcción de esas plantas”, aseguró el presidente Luis Abinader Corona, en su segundo discurso de rendición de cuentas.
Asimismo dijo que la apuesta de su Gobierno por un mejor entorno pasa indudablemente por una apuesta clara por las energías renovables.
Abinader aseguró que en el año 2021 su gobierno gestionó y firmó contratos para la instalación de proyectos de generación de electricidad a partir de energía solar por una cantidad de 530 MW adicionales, que es más del doble de los proyectos solares que se habían firmado en más de una década pasada.
“Esos nuevos parques fotovoltaicos se están construyendo en las regiones Sur, Cibao, Este y en el Gran Santo Domingo. Y se siguen analizando otros proyectos de energía solar para seguir aumentando la capacidad de energía solar y otras renovables en el país, añadió el mandatario.
Indicó que además, se ha avanzado en el estudio de la factibilidad de proyectos hidroeléctricos tales como: el Proyecto Hidroeléctrico Las Placetas, ubicado en la provincia de Santiago, Proyecto Hidroeléctrico Artibonito, en la provincia de Elías Piña, así como el Proyecto Hidro-bombeo Camú, en la provincia de La Vega.
Sobre el sector eléctrico Abinader expresó que ٙle place anunciarle al país, además, que desde el inicio de su gobierno trabajan alrededor de cinco ejes principales:
Primero, la ampliación y diversificación del parque de generación eléctrica, es decir, de la oferta de energía.
Segundo, la expansión y modernización del sistema de transmisión eléctrica del país.
Tercero, sanear la gestión y operación de las empresas distribuidoras, incluyendo la estabilidad del servicio, el incremento de la entrega de energía a la población y la mejora de sus infraestructuras operativas.
Cuarto, impulsar la producción de electricidad a partir de fuentes renovables como el sol, el viento, la biomasa y los residuos sólidos urbanos, así como promover la introducción de nuevas tecnologías y combustibles energéticos actualmente en rápido desarrollo y difusión en el mundo.
Y, quinto, reformar y fortalecer la gestión pública del sector, así como la mejora y actualización del marco legal y normativo que regula el mercado eléctrico nacional.
El primer mandatario indicó que en septiembre pasado se produjo la demanda máxima de energía del año 2021 y la diferencia entre esa demanda y la oferta o capacidad máxima de generación realmente disponible fue de tan solo 62 MW.
“Es decir que, si por alguna razón una de las plantas del sistema hubiese salido de operación en ese mes, el apagón hubiera sido inmediato e insalvable”. Agregó.
Abinader sostuvo que en la mayoría de las naciones de América Latina los sistemas eléctricos funcionan con una holgura o reserva de generación, denominada por los expertos como reserva fría, equivalente como mínimo a entre el 10 y el 15% de la demanda máxima, es decir entre 200 MW y 300 MW, mientras que la reserva encontrada por este gobierno en el 2020, como ya dijimos, era tan solo 62 MW, es decir, no llegaba al 2%.
Afirmó que conscientes de esa situación “dispusimos el lanzamiento en marzo del 2021 de una licitación pública internacional para la construcción de una central eléctrica de 800 MW, dividida en dos plantas de 400 MW cada una, junto a una terminal de descarga, almacenamiento y distribución de gas natural para abastecer de combustible a las nuevas generadoras”.
El presidente Abinader señaló que esas instalaciones se levantarán en la Bahía de Manzanillo y tendrán gran impacto económico y energético en todo el país y en especial en la región norte. El proceso de licitación está en fase de evaluación de las ofertas y las construcciones comenzaran este año.
De ese lado dijo que de igual manera, el pasado primero de diciembre se lanzó otra licitación internacional, con carácter de urgencia, para la instalación de hasta 400 MW basados en unidades generadoras de rápida instalación y ya disponibles en el mercado internacional. Estos 400 MW deberán entrar en operación este mismo año y es una previsión para cubrir la escalada de la demanda máxima que se producirá sin dudas en los meses calurosos del verano.
Abinader Corona, afirmó que recientemente, el día 6 de enero de este 2022, se lanzó otra licitación internacional de mediano plazo para otros 800 MW basados en plantas que serían instaladas en diferentes lugares del país.
“Todos los costos y préstamos los asumirán las empresas y consorcios privados que resulten ganadores de las licitaciones, mientras que el Estado dominicano a través de las empresas distribuidoras les comprará la energía y potencia mediante contratos competitivos de largo plazo. Eso nunca se había hecho en la República Dominicana, manifestó.
El presidente de la República afirmó que, “ningún gobierno anterior había diseñado y lanzado una estrategia de construcción de plantas eléctricas para dotar a nuestro sistema de capacidad suficiente para satisfacer la demanda, mantener gran reserva y sin invertir un peso del tesoro nacional”.
“Y si debemos cuidar nuestro modelo energético más aun debemos hacerlo con el recurso más esencial y vital para la vida; el agua,” expresó.
Indicó que así, puede anunciar que se han realizado las intervenciones necesarias para mejorar la operatividad de los sistemas de acueductos y alcantarillados en todo el país.