AFP.- Una de las caravanas migrantes que recorre México en busca de llegar a Estados Unidos alcanzó acuerdos con autoridades para que les otorguen más de 2.500 permisos de visitantes por razones humanitarias y serán traslados a diez estados.
Héctor Martínez Castuera, directivo del Instituto Nacional de Migración (INM), se presentó este martes en la localidad de Mapastepec, en Chiapas, para conversar con miembros de una caravana de más de 2.500 personas que salió el pasado lunes de la fronteriza Tapachula, en el mismo distrito.
“Los vamos a trasladar a 10 estados del país (…) les hemos ofertado además de la tarjeta que pondrán renovar, alojamiento en albergues y alternativas de empleo, entre otros”, dijo Martínez a la prensa.
Tras alcanzar el acuerdo, el INM instaló mesas para recibir las solicitudes de los migrantes, que por la tarde empezaron a ser traslados en una decena de autobuses a estados del centro, sur y oeste del país. Con este acuerdo, se habría conseguido desactivar esta caravana.
Otra caravana de unos 600 migrantes que partió hace un mes desde Chiapas se encontraba este martes en el estado de Veracruz.
Mientras, miles de migrantes varados en Tapachula bloquearon este martes una importante carretera en protesta porque el INM no ha cumplido una oferta similar de otorgarles permisos y llevarlos a otros estados.
El lunes, las autoridades instalaron en un estadio de la localidad las mesas para proceder al trámite de los permisos, pero se vieron superadas por los miles de migrantes que acudieron. Las autoridades suspendieron el proceso ante el tumulto generado.
“Ayer se canceló por el conflicto; los agentes de migración dejaron de atender por el desorden. El gobierno no nos tiene una respuesta contundente en qué nos van a ayudar y mientras eso no suceda seguirán los problemas”, dijo el migrante hondureño Darío Fernández, que viaja con su esposa y tres hijos.
El flujo de migrates sin papeles, que huyen de la violencia y la pobreza, se multiplicó tras la llegada a la presidencia de Estados Unidos del demócrata de Joe Biden, quien prometió analizar sus casos.
Más de 190.000 migrantes han sido detectados por autoridades mexicanas entre enero y septiembre, tres veces más que en 2020. Unos 74.300 han sido deportados.