Berlín,(EFE).- La canciller alemana, Angela Merkel, insistió hoy en que no optará a otro mandato, pese a la situación “excepcional” creada por la pandemia del coronavirus y a la revaloración de su liderazgo ante sus ciudadanos.
“No, no. Esto está muy firme”, aseguró la líder alemana, en una entrevista ante la televisión pública ZDF, preguntada sobre si se planteaba echarse atrás en su decisión de retirarse del cargo al final de la presente legislatura, como anunció en 2018.
En sentido parecido se pronunció poco después a la misma pregunta, en ese caso ante la primera cadena nacional, ARD, donde asimismo surgió la cuestión.
La gestión de la crisis de Merkel frente a la situación creada por la pandemia -“la crisis más grave que ha vivido la República Federal de Alemania”, en palabras de la canciller- cuenta con el respaldo mayoritario de los alemanes. Entre un 60 y un 70 % de los ciudadanos se muestran satisfechos con su liderazgo, según sondeos recientes de ambas televisiones.
Ello ha disparado la intención de voto hacia el bloque conservador de Merkel, que actualmente se sitúa en un 39 o 40 %, los más altos porcentajes de la actual legislatura.
LA SUCESIÓN PENDIENTE
La líder alemana, en el poder desde 2005, anunció en 2018 su retirada de la presidencia de la Unión Cristiano Demócrata (CDU), el partido que lideró durante 18 años, y que no optaría a un quinto mandato como canciller ni a ningún otro cargo político a escala alemana o europea.
Tomó su relevo al frente de la CDU Annegret Kramp-Karrenbauer, actual ministra de Defensa y leal a la línea de Merkel, quien a principios de este año y en medio de una fuerte crisis de liderazgo anunció asimismo que se retiraría del cargo.
La cuestión sucesoria debería haberse resuelto en un congreso extraordinario del partido, programado el pasado abril, pero que se canceló por las restricciones a la vida pública derivados de la pandemia.
Junto al relevo en la presidencia de la CDU está pendiente de resolución la candidatura del bloque conservador para las próximas elecciones generales, previstas para 2021. Desde hace décadas, ese puesto se decide por consenso entre la CDU y su hermanada Unión Socialcristiana de Baviera (CSU).
En medio de la indefinición del jefatura en el partido matriz, ha crecido la perspectiva de que el candidato conjunto del bloque conservador acabe siendo el primer ministro bávaro y líder de la CSU, Markus Söder, la segunda figura política mejor valorada del país tras Merkel.
Baviera ha sido el “Land” de Alemania más afectado por la pandemia -con 47.209 contagios, del total de 182.764 verificados durante toda la pandemia en el país, según las cifras oficiales del Instituto Robert Koch (RKI). Söder ha seguido en la gestión de la crisis la línea de la cautela parecida a la de Merkel y aplicó asimismo las restricciones de la vida pública más estrictas del país.