Un total de 436 cuerpos han sido exhumados de una fosa común masiva en Izium, según Oleh Syniehubov, jefe de la administración militar de la región de Járkiv, quien dijo que el trabajo se completó este viernes.
La mayoría de los cuerpos mostraban signos de muerte violenta, y 30 tenían rastros de tortura, dijo Syiehubov en una publicación en Telegram.
“Hay cuerpos con una cuerda alrededor del cuello, con las manos atadas, con miembros rotos y con heridas de bala. A varios hombres les han amputado los genitales. Todo esto es una prueba de la terrible tortura a la que los ocupantes sometieron a los residentes de Izium. La mayoría de los cadáveres son civiles, 21 son militares”, dice la publicación.
Syniehubov se comprometió a averiguar las circunstancias de cada una de las muertes “para que sus familiares y amigos sepan la verdad y los asesinos sean castigados”.
Dio las gracias a las 200 personas –expertos forenses, policías y empleados del Servicio Estatal de Emergencias– que han estado trabajando en el lugar de la región de Járkiv, recientemente reconquistada a las fuerzas rusas.
Syniehubov añadió que había al menos otros tres lugares con fosas masivas en otras zonas liberadas de la región de Járkiv.
“Todos los crímenes de los ocupantes serán documentados, y los autores pagarán por lo que han hecho”, dijo Syniehubov.
Un poco de contexto: Izium fue objeto de intensos ataques de artillería rusa en abril. La ciudad, situada cerca de la frontera entre las regiones de Járkiv y Donetsk, se convirtió en un importante centro de operaciones para los militares rusos durante cinco meses de ocupación. Las fuerzas ucranianas recuperaron el control de la ciudad el 10 de septiembre, asestando un golpe estratégico al asalto militar ruso en el este.
Por CNN.
