Por Joel Suriel.- En el último año varios miembros de la Policía Nacional han sido sometidos por ante la Justicia por las muertes de civiles bajo sus custodias, lo que ha provocado que el Gobierno del presidente Luis Abinader acelere el proceso de reformar esa institución.
Con el apresamiento de tres policías por la muerte a golpes de un barbero que estaba detenido, más los cuatro que fueron sometidos por el fallecimiento de David de los Santos, también a golpes, suman 17 los agentes del orden a los que el Ministerio Público les ha solicitado prisión preventiva por casos similares.
Las muertes de civiles, que han indignado a la sociedad dominicana, se han llevado de paso a oficiales de alto rango y subalternos, desde coroneles hasta rasos.
Por el caso que más policías han sido sometidos es por el asesinato a tiros de una pareja de pastores evangélicos, hecho en el que una patrulla completa estuvo involucrada. Este caso mantiene en prisión preventiva a 9 miembros de la institución del orden, incluido el coronel César Maríñez Lora, superior jerárquico de la patrulla que protagonizó el hecho la noche del 30 de marzo del 2021.
También, Victorino Reyes Navarro (segundo teniente), Domingo Perdomo Reyes (sargento), los cabos Norquis Rodríguez Jiménez y Ángel De Los Santos y los rasos Anthony Castro Pérez, Juan Samuel Ogando Solís, Emil Alexander Rincón Martes y Guillermo Rosario Melo.
Mientras que por el caso de la arquitecta Leslie Rosado se encuentra cumpliendo un año de prisión preventiva el cabo de la Policía Nacional Janil Disla Bautista, aunque este no estaba en servicio al momento del asesinato en agosto del año pasado.
Con la reciente muerte de un joven de 24 años en un destacamento del sector Naco, en el Distrito Nacional, cuatro oficiales fueron puestos a la acción de la justicia y están a la espera de que un tribunal dicte las medidas de coerción solicitadas por el Ministerio Público.
Los responsables de la muerte del joven David De los Santos Correa son el capitán Domingo Alberto Rodríguez Rodríguez, el segundo teniente Germán García de la Cruz, el cabo Alfonso Decena Hernández y el raso San Manuel González García (o Sari Manuel González García).
También, los civiles Santiago Mateo Victoriano, Michael Pérez Ramos y Jean Carlos Martínez Peña, quienes estaban recluidos en la celda de la cárcel del destacamento policial del sector Naco, en el Distrito Nacional, en la que los agentes imputados llevaron a la víctima el pasado 27 de abril, tras arrestarlo en Agora Mall, en donde la seguridad de la plaza comercial lo había retenido.
Mientras que, el Ministerio Público solicitará prisión preventiva, como medida de coerción, contra tres agentes policiales implicados en la muerte de un barbero al que agredieron brutalmente mientras lo detenían y en el tiempo en que lo retuvieron en el destacamento del sector Cienfuegos, en el distrito municipal Santiago Oeste.
El capitán Manolo Aquino, encargado de la Dirección Central de Investigaciones Criminales (Dicrim) en Cienfuegos; el primer teniente Manuel de Jesús de la Cruz y el segundo teniente Vladimir Joel Jerez Suárez enfrentan cargos criminales por la muerte a golpes del barbero Richard Rafael Báez.
Aunque una autopsia determinó que el joven José Custodio, quien murió en un destacamento de San José Ocoa falleció por un ataque cardíaco, el Ministerio Público solicitó otro estudio que lleven a las causas que provocaron ese deceso.
La dotación policial de ese destacamento fue trasladada, aunque ninguno ha sido sometido a la justicia.
Estos 17 oficiales guardan prisión mientras el Gobierno anuncia una serie de medidas para evitar el abuso policial en lo que se concreta la tan anhelada reforma de la institución del orden.
