El nombre de César Emilio Peralta era socialmente poco conocido, pero comenzó a tomar notoriedad a raíz del atentado que casi le costó la vida a David Ortiz Arias, ocurrido el nueve de junio del 2019.
Incluso, fue captado en vídeo por medios de comunicación y redes sociales cuando la misma noche del domingo 11 de junio, acudió a la Clínica Abel González, donde el ex astro de Grandes Ligas fue intervenido de emergencia.
A raíz de ese fatal acontecimiento, su nombre comenzó a tomas cuerpo y de inmediato surgieron especulaciones de que podría estar vinculado a la tentativa de homicidio.
Dos meses y 11 días después de ese acontecimiento, César El Abusador, se convierte en el personaje más famoso de República Dominicana, alcanzando nivel de reconocimiento público como el del propio Big Papi.
En un abrir y cerrar de ojos y a raíz del balazo dado a Ortiz en el centro diversión Dial Bar, Peralta pasa de ser un casi un total desconocido al más sensacional narcotraficante de la historia de la República.
La razón fue la ofensiva de la Procuraduría General de la República realizando 20 allanamientos simultáneos, en barrios y sectores encumbrados del Distrito Nacional para derrumbar de golpe, una red de lavado de activos y narcotráfico internacional encabezada por César el Abusaor.
Los allanamientos y persecuciones contra César El Abusador, sus bienes y miembros de su red, acontecieron a partir del el 20 agosto, apenas dos meses y 11 días después del atentado.
Más de 200 agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas, de la Policía Judicial y fiscales, con el apoyo de efectivos de la DEA y el FBI se lanzaron contrala red.
César El Abusador se dio a la fuga, mientras en el país fueron capturados más 25 individuos asociados a su red.
Es a partir de ese momento, cuando las autoridades y la opinión pública dominicana se enteran que César Emilio Peralta es narcotraficante de fama internacional, vinculado a importantes carteles de narcotráfico colombianos, entre los que se citan el denominado “Cartel del Golfo” o el grupo «Los Urabeños», ambos de alto nivel de violencia y de gran actividad en el tráfico de drogas a Estados Unidos y a Europa.
También que era buscado por los Marshall de Estados Unidos (agencia dependiente del FBI), que lo había puesto en “circular roja” por estar requerido por dos corte de Estados Unidos (Puerto Rico y la Florida) or tráfico de droga.
Esto contrasta mucho con un hombre que andaba a sus anchas en el país, figurando y auspiciando espectáculos del mundo artístico urbanos en sus propias y lujosas discotecas. Tomándose fotos con reconocidas figuras del arte y el béisbol de Grandes Ligas, incluio David Ortiz.
SEGUIMIENTO. Paralelamente a las investigaciones judiciales en RD, David Ortiz ordenó una investigación privada a cargo del excomisionado de Policías de Boston, Ed David.
Para el dos del 2019 diciembre, el capo dominicano fue capturado en Colombia, donde guardó prisión hasta ser pedido en extradición por Estados Unidos, específicamente a Puerto Rico, el 22 de diciembre del 2021.
Para esa época ya Davis tenía los resultados de su investigación sobre lo ocurrido contra David el nueve de junio del 2019, pero las conclusiones fueron reveladas el pasado sábado 19 de marzo del 2022.
Cuando ya la vinculación de César El Abusador con el atentado a Ortiz parecía un caso cerrado, todo volvió a resurgir a raíz de la investigación Ed Davis publicado por The Boston Globe, y esta vez, el nombre de César El Abusador se señala directamente como el responsable de ordenar la muerte del Big Papi.
Esta información contrasta completamente con la investigación oficial hecha por las autoridades dominicanas y que indica que Ortiz recibió un balazo de forma accidental, por parte de un escuadrón de sicarios, pues su objetivo era un amigo suyo, también nombre David y apellido Fernández, que compartían juntos el domingo de la desgracia en Dial Bar.
El tema vuelve a la palestra y refresca la memoria de los que dieron seguimiento al caso y restaron veracidad la investigación oficial de RD, presentada en rueda de prensa por una comisión de alto nivel, encabezada por el procurador general de la Republica de esa época, Jean Alain Rodríguez.
