El almirante retirado de la Armada de la República Dominicana y ex ministro de Defensa, Sigfrido Aramis Pared Pérez, asegura que el 98% de las embarcaciones que se encallan se debe a error humano, puesto que los niveles tecnológicos de los barcos actuales son muy precisos.
“De acuerdo a lo que son los niveles tecnológicos bajo los cuales se conducen una embarcación, en casi todos los barcos del mundo, en el 98% de los casos se debe a descuido, algún tipo de fallo, error personal, puesto que las cartas de la navegación actual indican claramente cuáles son las salidas y entradas de los puertos y los canales por los cuales debe navegar la embarcación; inclusive, más aún, la distancia a la costa lo cual debe navegar”, explicó el experto Pared Pérez.
Aunque no conoce las condiciones por las que se encalló la embarcación Norwegain Escape, poco después de zarpar de un muelle en Puerto Plata, sostiene que “en la mayoría de los casos son errores humanos”.
“Este tipo de embarcaciones tiene una tecnología. Tiene unos sonares que son de altísima resolución que dan la profundidad del fondo, así como también radares, sistemas de GPS que indican exactamente en qué lugar y en qué posición tú te encuentras, por lo tanto el hecho de que te aparezca un coral, un barril que pueda rozar o chocar el casco del barco es muy remoto a menos de que sea por un error humano en los momentos actuales”, argumentó el almirante retirado.
“No sé bajo qué condiciones, porque recuerda que hay comisión investigadora, no solamente de la parte oficial, sino también la misma compañía a la que pertenece el crucero, así como también la compañía de seguro que sustenta los daños que puedan ser ocasionados por el barco. Pero, en la mayoría de los casos son errores humanos”, dijo.
Eventualidades que pueden encallar una embarcación
Sigfrido Pared Pérez explica que pueden existir eventualidades que provocarían el encallamiento de una embarcación, saliendo o entrando a puerto, como “una corriente muy fuerte o una tormenta”.
“Por esa razón, muchas veces, cuando hay mal tiempo o situaciones riesgosas, las embarcaciones esperan a que el mal tiempo pase para poder salir a navegar”, señala.
Aunque esas razones pudieran ocurrir, el experto insiste que eso tendría que ser “algo sorpresivo o inesperado, puesto que el origen de las tormentas o la marejada son previsibles de acuerdo con los radares, así como también al sistema del tiempo con los barómetros. Pero pudiese ocurrir que así como una corriente o un viento inesperado, pero para eso están las potencias de las o embarcaciones”.
“Aunque no sé bajo qué criterio o condiciones sucedió este percance o accidente, pudiese ocurrir, pero es muy remoto puesto que la embarcación cuenta con las herramientas para poder salir airoso ante una situación e inclusive un evento inesperado”, expresó.
“Si naturalmente, viene una corriente y uno de los motores se apaga o el sistema de energía del barco se apaga, puede pasar, pero eso es muy remoto también, puesto que, hay auxiliares ya que este tipo de embarcaciones cuenta con varios motores, varias hélices y propelas para poder maniobrar rápidamente sin ningún tipo de riesgo”, argumentó el experto.
Sobre la embarcación que fue desencallada cercana a las costas de Puerto Plata, el comandante de la Armada dominicana, vicealmirante Ramón Betances Hernández, adelantó a periodistas que el buque encalló debido a “un gran viento” que hubo en la tarde, “de unos 30 nudos” (unos 56 km/h – 7 de 12 en escala Beaufort).
Tipos de encalles
Manifestó que hay dos tipos: los suaves y los difíciles.
Los encalles más suaves son aquellos que se dan en bancos de arena, esto lo que hace es que la quilla (columna vertebral del barco que va en la parte más profunda del barco, en la proa entre la roa y el codaste, una línea transversal) o también la mura, que es la parte del casco que está bajo el agua, se puede pegar a un barco de arena.
El encallamiento de roca, es difícil porque puede afectar el barco, hacer algo y romper el casco, puesto que “para sacar una embarcación encallada en roca o corales se necesita mucho más fuerza de remolcadores para poder sacarlo”, dice.
Un encalle con banco coralino también es difícil ya que con el tiempo estos arrecifes se convierten casi como una roca y esos también afectan el casco de una embarcación, manifiesta el experto.
“Cuando suceden este tipo de encallamientos los especialistas o los dueños del barco así como los capitanes, aspiran a que sea un banco de arena o fango, si es la salida de una ría próximo a un puerto, pero cuando es roca o cuando son corales ya es un poco más complicado”, expresó.
Asegura que todos los barcos actuales tienen doble fondo y doble casco para evitar que entre agua.