La carne es el pilar de muchas dietas en todo el mundo, no solo por su sabor, sino por ser una gran fuente de proteínas, minerales y vitaminas.
Un tipo de carne que suele encontrarse fuera del radar de las investigaciones científicas es la de cordero. ¿Es mejor que las otras variedades? ¿tiene beneficios para la salud? Aquí respondemos esas preguntas y más.
La carne de cordero procede de la mayoría de los ejemplares animales menores de un año (macho o hembra) pertenecientes al género Ovis, principalmente la oveja doméstica (Ovis aries). Los corderos suelen pesar entre 5 y 25 kg.
Beneficios del cordero
Se podría decir que es difícil conocer los verdaderos beneficios para la salud de la carne de cordero, debido a que no ha recibido tanta atención como otros tipos de carnes, como la de res, pollo o pescado, por parte de los investigadores.
La mayoría de sus propiedades generalmente derivan de estudios que analizaron los efectos de las “carnes rojas”, en la que se encasilla al cordero, o de investigaciones sobre la dieta mediterránea, un tipo de alimentación en la que el cordero es muy importante.
Crecimiento y desarrollo
El cordero posee muchas proteínas esenciales. Una porción de 3 onzas (85 g) contiene más de 23 g de proteína. Se aconseja que la ingesta diaria de proteínas sea de 0.8 g por kg de peso corporal. Esto significa que un adulto que pesa 75 kg (165 libras) debería consumir 60 g de proteínas al día.
Las proteínas cumplen todo tipo de funciones esenciales en el organismo, y se las considera nutrientes de construcción corporal, ya que intervienen en el desarrollo físico e intelectual.
Aporta hierro
Como carne roja, el cordero posee mucho más hierro que otras fuentes de proteínas, como es el caso del pollo o el pescado.
El hierro es un mineral que nos ayuda a crecer y desarrollarnos. Nuestro cuerpo lo usa para producir hemoglobina y mioglobina, proteínas de los glóbulos rojos que se encargan de trasportar el oxígeno a lo largo del cuerpo.
Gracias a que fomenta la oxigenación y la circulación sanguínea, el consumo de hierro puede ofrecernos distintos beneficios, como prevenir problemas cognitivos (como trastorno por déficit de atención con hiperactividad), mantener fuertes los músculos, aumentar la energía, reforzar nuestras defensas y fortalecer el cabello, piel y uñas.
Fuentes de vitamina B
La deficiencia de vitamina B12 es una afección común en personas con dietas vegetarianas estrictas, mujeres que sufren desnutrición durante el embrazo, o bebés con una alimentación deficiente.
Se estima que entre el 1.5 y 15% de las personas en los EE. UU. tienen deficiencia de vitamina B12.
La carne de cordero es una excelente fuente de B12, ya que una porción de 3 onzas (85 g) proporciona la mitad de la cantidad diaria recomendada de esta vitamina.
También es rica que otras vitaminas del complejo B, como vitamina B6, niacina (vitamina B3), riboflavina (vitamina B2) y ácido pantoténico (vitamina B5). Estas ayudan a que el sistema nervioso funcione correctamente.
Cardioprotector
El cordero, especialmente si se alimenta con pasto, es una importante fuente de ácidos grasos Omega 3, un tipo de grasa saludable que se asocia a un menor riesgo de inflamación y enfermedad cardíaca.
La evidencia científica demostró que las personas que incluyen a los ácidos grasos Omega 3 en sus dietas tienen un menor riesgo de sufrir arritmias, y niveles altos de colesterol, triglicéridos y presión arterial, que aquellas que no los incluyen en su alimentación.
Mejores defensas
El cordero posee muchas proteínas, vitaminas y minerales. Entre estos últimos, se destaca el zinc: una porción de 3 onzas (85 g) de carne de cordero contiene 4.4 mg de zinc (el consumo diario recomendado es de 10 mg).
El zinc se vincula a una mejor respuesta inmunitaria, ya que parece ayudar a prevenir resfriados, pérdida ósea, ceguera nocturna, alopecia, fatiga crónica, infertilidad, y trastornos de próstata.
También estimula la síntesis de proteínas, el crecimiento celular y cumple un rol importante en la regulación de la producción de testosterona, así como en la síntesis de colágeno.
Esto es clave para normalizar la presencia de grasa debajo de la piel, mejorando así la salud cutánea y previniendo la aparición de trastornos como acné, espinillas o eccema.
Precauciones
Aunque la carne de cordero es muy sabrosa y puede brindar nutrientes esenciales al organismo, los expertos aseguran que la clave se encuentra en la moderación.
Consumirla en grandes cantidades puede ser contraproducente, ya que es una carne rica en grasas. Esto puede causar acumulación de colesterol en las arterias, aumentando así el riesgo de enfermedad cardíaca.
También puede provocar exceso de peso u obesidad, que se vinculan a más de 200 afecciones médicas diferentes, incluido cáncer, diabetes tipo 2, osteoartritis, apnea obstructiva del sueño y enfermedad por reflujo gastroesofágico.
Fuente: Hola doctor
