Jordania celebra elecciones en medio del confinamiento y una crisis económica - N Digital
ActualidadfacebookInternacionales

Jordania celebra elecciones en medio del confinamiento y una crisis económica

EFE. Los colegios electorales abrieron hoy por la mañana en Jordania con motivo de las nuevas elecciones parlamentarias en un país que se hunde en una crisis económica agravada por la pandemia del coronavirus.

Más de 4,6 millones de jordanos han sido llamados a las urnas este martes para elegir un nuevo Parlamento, unos comicios marcados por un repunte de casos de coronavirus en el reino hachemita que ha obligado a las autoridades del país a imponer un toque de queda total de cuatro días.

En un contexto de crisis y tensiones sociales, los jordanos están llamados a elegir a los 130 miembros de la Cámara, incluidos 15 escaños reservados para mujeres.

La elección debe hacerse entre 1.674 candidatos, entre ellos 360 mujeres, de 294 listas electorales para un escrutinio sin grandes apuestas, ya que el Parlamento desempeña un papel limitado en el gobierno del país en el que el Rey Abdalá II tiene amplios poderes.

Jordania es una monarquía parlamentaria, en la que el rey es una figura central y toma las decisiones en los asuntos más destacados, tanto políticos como económicos y de Estado.

Los anteriores comicios parlamentarios se celebraron el 20 de septiembre de 2016, por primera vez con un sistema proporcional de listas de partidos y con la vuelta de los islamistas tras nueve años de ausencia.

El 12 de octubre formó un nuevo Gobierno, tras la dimisión del anterior tras la disolución del parlamento por el rey el 27 de septiembre, después de cuatro años en el cargo según lo estipulado en la Constitución.

Se hicieron varios llamamientos a través de las redes sociales para posponer las elecciones debido a la pandemia, pero el Gobierno ha indicado que las elecciones se mantendrán.

Más de 50.000 miembros de las fuerzas de seguridad fueron desplegados en las 12 provincias del reino para asegurar el buen funcionamiento del proceso y, en particular, el respeto de las medidas sanitarias. “Hemos intentado proteger los centros de votación y monitorear el cumplimiento de las medidas sanitarias”, dijo hoy a la televisión estatal el jefe del departamento de Seguridad Pública, el general Hussein Hawatmeh.

Los colegios electorales en Jordania abrieron sus puertas a las 7h (5h GMT) y cerrarán a las 19h (17h GMT), aunque las autoridades han advertido de que el horario de voto puede extenderse hasta dos horas debido a las estrictas medidas impuestas, que pueden desalentar la participación en estos comicios.

Los votantes jordanos votan este martes en unas elecciones parlamentarias disputadas por candidatos que hicieron campaña con promesas de una vida mejor para los ciudadanos en lugar de una plataforma política, en un país que se hunde en una crisis económica agravada por la pandemia del coronavirus.

Privado de recursos naturales y muy dependiente de la ayuda exterior, en particular del Fondo Monetario Internacional (FMI), este pequeño país de 10 millones de habitantes, muy afectado por la afluencia de refugiados sirios, tiene una deuda pública superior al 100% del PIB.

Jordania se ha visto muy afectada por el coronavirus, especialmente sector del turismo, que perdió alrededor de 2.500 millones de euros en ingresos en los primeros ocho meses de este año, y miles de puestos de trabajo se ven ahora amenazados por la segunda ola.

Estos comicios se enfrentan a una difícil situación económica, con una tasa de desempleo del 23% en el primer trimestre de 2020, y manifestaciones que exigen aumentos salariales. Muchos candidatos han hecho de la economía la prioridad en sus discursos, en un país donde el índice de pobreza es del 15,7% de la población, según el Banco Mundial.

Un total de 41 partidos políticos han presentado candidatos en listas únicas o mixtas, con independientes que cuentan con el respaldo de líderes tribales.

Los candidatos incluyen representantes de los principales clanes tribales, independientes y figuras de izquierda, pero la mayor fuerza de oposición, es el Frente de Acción Islámica (FAI), una filial política del movimiento de Hermanos Musulmanes que se disolvió en julio cuando la formación tenía 17 escaños, el mayor número de diputados, en el parlamento saliente, un número que los hacía un grupo mayoritario.

Subscríbete al ABC del Día