Las autoridades de Salud Pública pasan balance hoy a la primera fase de la desescalada económica y movilidad social, para dar paso a la segunda reapertura, tras la expansión del coronavirus.
En los 15 días correspondiente a la primera fase, que inició el 20 de mayo, al menos 70 muertos y cuatro mil 95 individuos se contagiaron con la enfermedad.
El ministro de Salud, Rafael Sánchez Cárdenas ofrece este miércoles el balance de lo acontecido en el primer tramo.
Mientras, el Gobierno continúa hoy a la segunda fase de la desescalada, como estaba previsto, pero advirtió de que existe un “peligroso” relajamiento de las precauciones en algunos puntos del país.
En la segunda fase se reinicia el transporte colectivo privado y se permite el aumento del número de trabajadores de las empresas, entre otras medidas.
Las empresas de entre uno y diez empleados podrán operar con la totalidad de sus trabajadores, mientras las que tienen entre 11 y 50 empleados podrán incorporar el 75 % de su plantilla, y las empresas medianas y grandes podrán trabajar con el 50 % del personal, dijo el ministro de la Presidencia, Gustavo Montalvo en un discurso por televisión.
“Recordamos que ahora podrán seguir abiertos las tiendas de los centros comerciales, pero permanecerán cerradas las áreas de alimentos, juegos y establecimientos de recreación a fin de evitar el aglomeramiento de personas”, expuso el alto cargo, para agregar que las iglesias podrán abrir sus puertas solo los domingos con un porcentaje reducido de personas.
En el caso de la grey adventista y de otras congregaciones que ofrecen sus cultos los sábados, el Gobierno les permitirá hacerlo ese día.
Los autobuses del transporte colectivo privado solo podrán operar en esta fase con el 60 % de su capacidad, agregó Montalvo, al tiempo de enfatizar que “todavía” no se pueden celebrar reuniones sociales sin condiciones de distanciamiento físico, incluso antes del toque de queda.
“Como todos hemos podido observar, se está produciendo un peligroso relajamiento de las precauciones en varios puntos del país; por eso se hace necesario advertir, nuevamente, de la importancia de estas medidas, porque el virus no ha desaparecido”, puntualizó.
Montalvo advirtió de que se corre el riesgo de que “el éxito” logrado hasta ahora de controlar el COVID-19, lleve a la población a “perderle el miedo” y olvidar su potencial de letalidad.
“Eso implica, para todos, el uso de la mascarilla en espacios públicos, así como mantener las medidas de higiene y distancia social. Vamos por buen camino, ahora el reto es no desviarnos del mismo”, advirtió.
República Dominicana es el segundo país de América Latina que más ha reducido el ritmo de crecimiento del número de contagiados, solamente superado por Ecuador, dijo el ministro, tomando como referencia una de datos del Banco Central de Chile que estima el número básico de reproducción del virus para los distintos países.
El país caribeño, que reporta 515 fallecidos y 17,752 contagios por coronavirus, inició la desescalada el 20 de mayo pasado con la apertura del transporte colectivo público, el reinicio de operación de las empresas y pequeños negocios como barberías, tiendas de computadoras, talleres y salones de belleza.
La nación se mantiene en estado de emergencia desde el 19 de marzo, mientras impera también un toque de queda desde las 7.00 de la noche a las 5.00 de la mañana, horas locales.EFE