Ante los últimos hechos delictivos y violentos registrados en la República Dominicana, el obispo de la Diócesis de Baní, Víctor Masalles, atribuyó estos sucesos a las fallas que presenta el proceso educativo en el país.
“Estamos creando un país violento y un país que no se le pone límites puede llegar a cualquier cosa, por eso las estadísticas de feminicidios, los atracos, y el triste panomara que se observa en las escuelas”.
También señaló que en el país se están dando todas las condiciones para educar una sociedad “violenta”.
“La violencia no se recrudece, eso siempre ha estado así, somos un país que estamos teniendo una convivencia muy violenta, incluso hemos visto asesinatos por un parqueo o un choque”, dijo el sacerdote a periodistas que lo abordaron.
Para contrarrestar este mal, el obispo de la Diócesis de Baní anunció la creación de un plan piloto sobre educación socio afectiva que se llama “Aprendiendo a querer”, el que “demostrará que es en el proceso educativo que se combate la violencia”.
“Este plan involucrará a más de 26 mil alumnos y demostrará en 3 años que es en el proceso educativo donde tenemos que enseñarles a los jóvenes y niños a manejar la presión de grupo, el bullyng, etc”.
Este programa, según Masalles, se ha implementado en 24 países como Venezuela, Alemania, Hungría, Corea, entre otros.
Por otro lado, la alta autoridad de la Iglesia Católica abogó porque se formalice la creación del Fiscal Electoral que perseguirá los delitos que se cometan en las próximas elecciones municipales, congresuales y presidenciales de febrero y mayo del presente año.
“Por lo que abogamos es porque se cumpla la ley, de nada vale crear instituciones si no se cumple con el mandato de la ley, queremos ver a los transgresores de los delitos electorales en el banquillo de los acusados”, dijo Víctor Masalles, obispo de la Diócesis de Baní.