Una comisaría del pueblo Anse-Au-Pitre, en Haití, que hace frontera con Pedernales, en República Dominicana, fue incendiada por una turba de haitianos, luego que agentes policiales de ese país presuntamente mataran a un líder comunitario de 26 años.
Resultado de ese ataque, seis policías haitianos se refugiaron en el municipio Pedernales para resguardar sus vidas. Durante las protestas al menos dos agentes policiales resultaron heridos. Los militares dominicanos de puesto en la frontera brindaron protección a los haitianos.
El joven muerto por la policía haitiana solo fue identificado como King Kong, quien está siendo velado en el poblado de Anse-Au-Pitre, en medio de la consternación, pero con música y su acostumbrada tradición de bailes a ritmo de “Gaga”, tambora y güira.
También, los manifestantes prendieron fuego a varios vehículos que se encontraban en el patio de la comisaría.