Redacción NDigital
Santo Domingo
Jonathan Lamb, de nacionalidad británica, y su esposa Sonnia Baby de origen canadiense, como otros tantos extranjeros, en abril de este año decidir radicarse e invertir en la República Dominicana, sin imaginarse el calvario que tendrían que pasar, y de la estafa que serían víctima, según denuncian.
En abril de este año, Jonathan Lamb, quien tiene más de 20 años de experiencia en el manejo de compañías de seguridad en Canadá, decide junto a su esposa Sonnia comprar una compañía de seguridad en Sosúa, Puerto Plata la cual les había sido ofertada a bajo precio.
Por 150 mil dólares, Jonathan y Sonia adquieren la compañía de seguridad Black Wolf, en un negocio que incluía su mobiliario, el personal administrativo, los vigilantes, y las armas de la empresa.
Según narró Sonnia a NDigital, después que ella y su esposo hicieron la inversión por ese monto más 750 mil pesos de unas deudas que tuvieron que asumir, entre otros gastos, deciden contratar a la abogada Anny Magdalena Infante para que lleve los asuntos legales de la empresa, pero más tarde ésta junto a Sandro Moronta, terminan siendo los propietarios de la empresa, prohibiéndole incluso la entrada a ella y su pareja.
“Ella presume mucho de que está muy enchufada con el Gobierno, y de que gana todos los casos”, dice Sonnia con relación a Anny.
Narra que el señor Moronta fue hasta la oficina de su esposo de forma amenazante acompañado de un hombre con una escopeta, le lanzó unos documentos, y este al no hablar español y ver la actitud de ambos, optó por abandonar el sitio.
Ante esa situación, buscan ayuda con otros abogados, incluso acuden una embajada en Ottawa, la capital de Canadá a buscar ayuda, donde lo que le dicen es “ese país está en la lista negra de la embajada de lugares a los que no se puede ir a invertir, por los niveles de corrupción, no podemos hacer nada”.
Cuando adquirieron la compañía, la pareja rentó una propiedad en el residencial La Mulata, donde Jhonatan salió a dar un paseo y fue atacado en un lugar oscuro por un desconocido con un machete.
El individuo intento herirlo en la parte torácica, pero este al defenderse, resultó cortado en la mano, por lo que estuvo recluido entendido en un hospital de Cabarete, Puerto Plata.
Tanto Sonia como su esposo Jonathan, se sienten decepcionados e intimidados por quienes aseguran le han estafado, debido a la influencia y las conexiones que estos presumen tener, frente a ellos que no tienen a más nadie en el país, y siendo ella la única que habla español.
Los extranjeros pidieron al Ministerio Público y demás autoridades, investigar las circunstancia en que fueron despojados de sus inversiones, y que se haga justicia.
“Ya no nos interesa la compañía, solo queremos nuestro dinero que hemos invertido”, manifestó Sonnia Baby al ser entrevistada por NDigital, mientras su esposo aún se recupera del brutal y desconocido ataque que sufrió en ese contexto.
