El Síndrome de Alicia en el País de las Maravillas suele aparecer en la infancia y se debe a la distorsión de la realidad que sufren los niños.
Esta es la razón por la que se le conozca como síndrome de Alicia en el país de las maravillas, ya que se caracteriza porque los niños se desorientan y perciben la realidad de una forma extraña y distorsionada.
¿En qué consiste este síndrome?
El síndrome lleva como nombre el mismo título de la obra del escritor Lewis Carrol, debido a que los efectos que se producen concuerdan con lo que se narra en este libro: una niña que ve su realidad distorsionada y magnificada.
Pero de acuerdo a lamenteesmaravillosa.com, se trata de un trastorno neurológico que aparece con frecuencia en la niñez. Se caracteriza por la alteración de la percepción visual y también la distorsión de la imagen corporal. Quien sufre de este síndrome percibirá los objetos o demasiado grandes o demasiado pequeños.
¿Cuáles son las causas?
Los estudios que se han realizado, han arrojado que la edad promedio de los que tienen esta enfermedad ronda los 8 años. Además, un buen porcentaje de ellos sufrieron de migrañas o alguna infección.
Por otro lado, otra posible causa tiene que ver con la epilepsia del lóbulo temporal del cerebro. Cuando aparecen estas convulsiones, la química del cerebro se ve afectada, originando miedos intensos o incluso paranoia.
Además, la señales que envía el cerebro a los ojos terminan distorsionándose, causando alucinaciones y desorientación, al mismo tiempo que se perciben ciertas partes del cuerpo alteradas.
Síntomas y tratamiento
Como se puede notar, los síntomas son constante dolor de cabeza, o migraña. Percepción irreal de los objetos, y miedo a los mismos. Esto se refleja en la actitud del niño. Para poder superarlo, es recomendable que el niño duerma bien, practique actividades físicas y disfrute de vida social con otros niños.
Por lo general, este síndrome dura poco tiempo, y a medida que va creciendo desaparece. Sin embargo, cuando este pasa a una fase crónica, es necesario realizar un análisis más exhaustivo y un tratamiento especializado.
Fuente: La Opinión