El índice de precios al consumo (IPC) subió un 0,1% en Estados Unidos en agosto, mientras que la inflación interanual bajó del 1,8% al 1,7%, informó el Gobierno estadounidense.
La inflación subyacente, que excluye los precios de la energía y alimentos debido a su volatilidad, ascendió un 0,3% el mes pasado, mientras que comparado con agosto del año pasado creció del 2,2% al 2,4%, el mayor nivel en 13 meses.
La cifra coincidió con las expectativas de los analistas.
El precio de la gasolina bajó el pasado mes, mientras que los de los alquileres y la sanidad subieron.
El dato se conoce una semana antes de la nueva reunión de la Reserva Federal (Fed), y en las que han crecido las expectativas de que el banco central lleve a cabo un nuevo recorte del precio del dinero.
La Fed ya rebajó los tipos de interés un cuarto de punto en su último encuentro en julio, hasta el rango de entre el 2 y el 2,25%.
El presidente de EEUU, Donald Trump, ha criticado de manera reiterada al banco central y urgió este miércoles rebajar el precio del dinero “a cero o menos” para contribuir a la expansión económica.
En la primera mitad del año, la Fed decidió pulsar el botón de pausa en su plan de progresivo ajuste monetario para 2019 ante la ralentización económica global, las tensiones comerciales y la debilidad de los precios en EE.UU., que se encuentran por debajo del objetivo anual de la Fed del 2% anual.