La constructora brasileña Odebrecht solicitó el pasado lunes acogerse al capítulo 15 de la ley de bancarrotas en Estados Unidos, tras declararse en quiebra en Brasil en junio pasado.
El grupo de construcción presentó la solicitud de protección por bancarrota en Nueva York, en la que sería la mayor bancarrota de una compañía en Latinoamérica.
La empresa debe reestructurar alrededor de 22.490 millones de euros de deuda (25.000 millones de dólares).
Si el procedimiento brasileño es reconocido en el tribunal de Nueva York, Odebrecht podría disfrutar de los beneficios de las leyes de bancarrota de Estados Unidos, como la protección contra la incautación de activos en el país.
En diciembre de ese año, el Departamento de Justicia de Estados Unidos reveló que Odebrecht había pagado 788 millones de dólares en sobornos a funcionarios gubernamentales en doce países: Argentina, Brasil, Colombia, la República Dominicana, Ecuador, Guatemala, México, Mozambique, Panamá, Perú, Venezuela y Angola.