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El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, afirmó que el Kremlin no tiene intenciones de poner fin a la guerra, luego de un ataque ruso con drones y misiles en Kiev, que dejó al menos un muerto y varios heridos.
Tras la serie de explosiones, medios captaron imágenes de calles llenas de escombros y el cuerpo de una víctima cubierto con una lámina de plástico negro. Zelensky informó que, además del fallecido, cuatro personas resultaron heridas, entre ellas un niño.
El presidente ucraniano señaló que Vladimir Putin “no se está preparando para la paz, sigue matando a ucranianos y destruyendo ciudades”. En un mensaje en redes sociales, pidió más presión internacional contra Rusia para frenar los ataques.
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El Ministerio de Defensa ruso justificó el bombardeo asegurando que los ataques estaban dirigidos a instalaciones militares e industriales ucranianas. “Todos los objetivos fueron alcanzados”, indicó en un comunicado.
El ataque se produce en un momento de creciente debate sobre una posible negociación para poner fin a la guerra. Zelensky tiene previsto reunirse con el vicepresidente de EE.UU., JD Vance, en la Conferencia de Seguridad de Múnich, mientras que el enviado especial de Donald Trump, Keith Kellogg, viajará a Ucrania en los próximos días.
Mientras tanto, la violencia no cesa. En la región de Chernigiv, las fuerzas rusas atacaron infraestructura clave, dejando más heridos. La fuerza aérea ucraniana informó que derribó seis misiles y 71 drones de ataque, incluidos los Shahed de fabricación iraní.
Con la guerra cerca de cumplir tres años, el futuro del conflicto sigue incierto, mientras Ucrania busca apoyo internacional y Rusia mantiene su ofensiva en el campo de batalla.
EFE
Por: Itzel Olivo