Contribuciones al desarrollo industrial y ambiental
José Manuel Armenteros Rius fue fundador de Mendoza, Armenteros y Asociados (Mendar, S.A.) en 1954, una empresa clave en el ámbito de los proyectos hidroeléctricos, diseño de acueductos rurales, estudios hidrológicos e hidráulicos, entre otros. A lo largo de su carrera, participó en más de 200 proyectos, muchos de los cuales fueron fundamentales para el aprovechamiento múltiple de los ríos en el país.
Armenteros Rius también fue un firme defensor del medio ambiente y un fundador de ProNatura, el Fondo Pro-Naturaleza, una organización sin fines de lucro dedicada a la conservación de cuencas hidrográficas y la implementación de prácticas de conservación de suelos, reforestación, y restauración ecológica, entre otras acciones en favor del medio ambiente.
Compromiso con la educación y el desarrollo cultural
En el ámbito educativo, Armenteros Rius fue fundador y vicepresidente de la Fundación Universitaria Católica, además de vicepresidente de la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (UNPHU). También fue miembro activo de la Acción Pro-Educación y Cultura (APEC), contribuyendo al desarrollo de la educación y la cultura en la República Dominicana.
Representación internacional
A lo largo de su vida, José Manuel Armenteros Rius representó a la República Dominicana en diversos organismos internacionales. Destacó su participación en el Banco Interamericano de Desarrollo en Vancouver, la Federación Interamericana de Consultores en México, y su participación en las reuniones del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional en Washington y Tokio.
Memorias y legado
El año pasado, en un emotivo acto que reunió a personalidades del ámbito empresarial, amigos y familiares, se presentaron las memorias de Armenteros Rius, tituladas “Casi 100 años de memoria, de un hombre de números largos”, un testimonio invaluable de su vida y legado.
Con su fallecimiento, la República Dominicana pierde a uno de sus grandes empresarios y defensores del desarrollo social y económico del país, pero su legado perdurará en las generaciones venideras.
Por: Yari Araujo