DEIR AL-BALAH, Gaza (AP).— Ataques aéreos israelíes alcanzaron una cafetería y una vivienda en Gaza y mataron a unas 14 personas, según funcionarios de salud. En el Líbano, aviones de guerra atacaron los suburbios del sur de la capital, Beirut, luego de que el ejército de Israel ordenara la evacuación de varias casas en la zona.
El nuevo bombardeo en ambos frentes se produce en el límite del plazo establecido por Estados Unidos para que Israel aumente drásticamente la ayuda humanitaria que deja entrar en Gaza o se arriesgue a sufrir posibles restricciones en la financiación militar que recibe de Washington. Un grupo de ocho agencias internacionales dijeron en un reporte publicado el martes que Israel no ha cumplido con las demandas de su aliado.
En Líbano, grandes explosiones sacudieron los suburbios del sur de Beirut, una zona conocida como Dahiyeh donde Hezbollah tiene una importante presencia, poco después de que el ejército israelí emitió órdenes de evacuación para 11 viviendas en la zona.
No se reportaron víctimas de inmediato. El ejército dijo que en los edificios había instalaciones de Hezbollah, pero la afirmación no pudo confirmarse de forma independiente.
Un ataque israelí alcanzó la localidad de Ain Yaacoub, en el norte de Líbano, y mató a por lo menos 16 personas, según la defensa civil libanesa. Cuatro de los muertos eran refugiados sirios y 10 personas más resultaron heridas. El ejército no realizó comentarios acerca de ese operativo.
Israel lanza intensos bombardeos contra Líbano desde finales de septiembre, con el objetivo de incapacitar a Hezbollah y poner fin a más de un año de fuego cruzado por parte del grupo político-paramilitar hacia el norte de Israel.
Al mismo tiempo, Israel continúa con su campaña en Gaza, que dura ya más de 13 meses, tras el ataque liderado por Hamás sobre el sur de Israel el 7 de octubre de 2023.
Un ataque el lunes por la noche impactó una cafetería improvisada utilizada por personas desplazadas en Muwasi, el centro de la llamada zona humanitaria. Al menos 11 personas murieron, incluyendo dos niños, indicaron funcionarios del Hospital Nasser, a donde fueron llevadas las víctimas. Un video del lugar mostró a hombres sacando a heridos ensangrentados de entre las mesas y sillas dispuestas en la arena dentro de un recinto hecho con chapas metálicas onduladas.
Otro ataque el martes por la mañana alcanzó una casa en el campo de refugiados urbano de Nuseirat, en el centro de la Franja, y se cobró la vida de tres personas, entre las que había una mujer, dijo el Hospital al-Awda, que recibió a las víctimas. Esta operación dejó además 11 heridos, indicó.
El ejército israelí no realizó comentarios de inmediato acerca de ninguno de los ataques.
Horas antes, el ejército israelí anunció una pequeña ampliación de esa zona humanitaria, donde ha indicado a los palestinos que abandonan otros lugares del sitiado enclave que busquen refugio. Cientos de miles de palestinos desplazados viven en extensos asentamientos de tiendas de campaña dentro y alrededor de Muwasi, una zona en gran parte desolada de dunas y campos agrícolas, con pocas instalaciones o servicios, a lo largo de la costa mediterránea del sur de Gaza.
Las fuerzas israelíes también han estado asediando la parte más septentrional de la Franja desde principios de octubre, combatiendo a los insurgentes de Hamás que, según dicen, se reagruparon allí.
Al no haberse permitido la entrada de prácticamente ningún alimento no ayuda durante más de un mes, el asedio ha hecho temer una hambruna entre las decenas de miles de palestinos que se cree que siguen refugiados allí.
Una carta del 13 de octubre firmada por el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y el de Defensa, Lloyd Austin, dio a Israel 30 días para, entre otras cosas, permitir la entrada de un mínimo de 350 camiones de mercancías a Gaza al día.
Hasta ahora, Israel no ha llegado a esa cifra. En octubre, en el sitiado territorio entraron, de media, 57 camiones al día, mientras que en los 10 primeros días de noviembre el promedio alcanzó los 70, según datos israelíes. Las cifras de Naciones Unidas son más bajas, con 37 camiones diarios desde principios de octubre.
En los últimos días, Israel ha anunciado una serie de medidas para aumentar la ayuda, incluyendo la apertura de un nuevo cruce hacia el centro de Gaza. Pero por el momento, el impacto no estaba claro.
El ejército dijo el martes que había permitido la entrada de cientos de paquetes de alimentos y agua en Jabaliya y Beit Hanoun, dos zonas asediadas en el extremo norte de la Franja. La agencia de defensa civil palestina dijo que tres camiones con harina, comida enlatada y agua llegaron a Beit Hanoun.
Fue apenas la segunda entrega permitida para la zona desde principios de octubre. La semana pasada entró un cargamento más pequeño que no llegó a todas las zonas refugio del norte, dijo la ONU.
El ejército reportó el martes que cuatro soldados fueron asesinados en Jabaliya, elevando a 24 el número de bajas desde el inicio del asalto allí. Funcionarios de salud gazatíes sostienen que cientos de palestinos han sido asesinados, aunque la cifra real se desconoce porque los rescatistas no pueden llegar a los edificios destruidos en los ataques. Israel ha ordenado a los residentes que desalojen la zona, pero Naciones Unidas estima que unas 70.000 personas siguen allí.
Muchos residentes palestinos temen que el objetivo de Israel sea evacuar permanentemente la zona para mantener más fácilmente el control sobre ella. El martes, testigos dijeron a The Associated Press que los soldados habían cercado al menos tres escuelas en Beit Hanoun, obligando a cientos de desplazados refugiados en ellas a salir.
Aviones no tripulados emitían anuncios pidiendo a la gente que se fuese al sur, a la Ciudad de Gaza, dijo Mahmoud al-Kafarnah, hablando desde una de las escuelas mientras se escuchaban sonidos de disparos.
“Los tanques están fuera”, contó. “No sabemos dónde ir”.
Hashim Afanah, que se refugiaba con al menos 20 personas más en su casa familiar, dijo que las tropas estaban sacando a la gente de viviendas y refugios.
La campaña de 13 meses de Israel en Gaza ha matado a más de 43.000 palestinos, según funcionarios locales de salud, que no distinguen entre víctimas civiles e insurgentes en su conteo pero afirman que más de la mitad eran mujeres y niños. Israel sostiene que su objetivo son los milicianos de Hamás y culpa al grupo de las muertes de civiles, diciendo que opera en áreas residenciales e infraestructura y entre los desplazados.
La guerra en Gaza comenzó cuando insurgentes liderados por Hamás asaltaron el sur de Israel el 7 de octubre de 2023 y mataron a unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, y tomaron a otras 250 como rehenes. Alrededor de un centenar siguen en el enclave palestino y se cree que aproximadamente un tercio están muertos.
Por: AP
Edición: LA