Una serie de ataques aéreos israelíes tuvieron como objetivo a los rebeldes hutíes en Yemen este sábado, un día después de que el grupo respaldado por Irán reivindicara un ataque mortal contra la ciudad israelí de Tel Aviv.
El ataque con drones en Tel Aviv el viernes mató a un hombre e hirió al menos a otros 10.
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Los hutíes, respaldados por Irán, dijeron que el ataque fue una respuesta a la guerra de Israel en Gaza, y un portavoz dijo que la operación fue realizada por un nuevo dron capaz de “evitar los sistemas de interceptación del enemigo”.
Según la agencia de noticias local Al-Masirah, las redadas israelí-estadounidenses han tendido como objetivo las instalaciones de almacenamiento de petróleo en el puerto de Al-Hudayda, lo que provocó un gran incendio.
Asimismo, han atacado la central eléctrica en la zona de Ras Kuthaib de la provincia costera en el mar Rojo.
La agresión contra la ciudad yemení fue llevada a cabo por aviones de combate israelíes F-35, según los informes.
Las incursiones en Yemen fueron coordinadas entre fuerzas estadounidenses e israelíes, han indicado fuentes, citadas por la cadena libanesa Al-Mayadeen.
El Ministerio de Salud de Yemen ha anunciado que hay varios muertos y heridos como resultado de los ataques del enemigo israelí. Varios ciudadanos sufrieron graves quemaduras por los ataques, ha aseverado la Cartera.
