A dos décadas del estreno de la telenovela original y decenas de adaptaciones alrededor del mundo después, la historia de la eficiente pero poco atractiva secretaria que se enamora de su jefe sigue rompiendo récords de audiencia en la televisión, esta vez en el prime time hispano.
Aupada por un partido de fútbol de la Copa América que sobrepasó el millón y medio de televidentes y en un horario especial –empezó más tarde de lo habitual–, la ficción de Telemundo protagonizada por Elyfer Torres y Erick Elías logró el pasado viernes su marca más alta hasta la fecha tras seducir a 1,6 millones (P2+) y 806 mil televidentes entre adultos 18-49 años.
Su dato más alto hasta ese día había sido 1,5 millones (P2+), cifra que registró el pasado 22 de abril coincidiendo con el estreno de la segunda temporada de La reina del sur.
Por primera vez desde su debut, la telenovela en la que también participan Sabrina Seara, Aarón Díaz y Héctor Suárez Gomís, logró arrebatarle el primer lugar de audiencia al producto estrella de Telemundo, la superserie que encabeza Kate del Castillo, que promedió 1,4 millones de televidentes (P2+) luego de tener que cederle parte de su franja horaria a Betty en NY.
Telenovelas más vistas (viernes, 28 de junio):
- Betty en NY: 1,6 M
- La reina del sur: 1,4 M
- La rosa de Guadalupe: 1,3 M
- La reina soy yo: 1,2 M
- Por amar sin ley: 1 M
Rumbo a sus capítulos finales, la nueva versión de Yo soy Betty la fea sigue cautivando al público como en su día lo hiciera la trama encabezada por Ana María Orozco y Jorge Enrique Abello.
Y se espera que la audiencia de la telenovela aumente todavía más durante los próximos capítulos cuando se produzca el tan esperado cambio de look de su protagonista.
Betty en NY gira alrededor de Beatriz Aurora Rincón Lozano (Torres), una joven mexicana muy inteligente y capaz que vive en la ciudad de Nueva York e irá tras sus sueños venciendo prejuicios en un mundo donde la imagen lo es todo. Después de sufrir seis meses de rechazos en todos los trabajos a los que aplica debido a su apariencia física, Betty decide aceptar un empleo muy por debajo de sus capacidades. Así, después de ingresar a la sofisticada compañía de moda V&M Fashion, se convierte en la secretaria personal del presidente de la empresa.
Aunque es ridiculizada y humillada a diario por carecer completamente de estilo, Betty está más que dispuesta a no dejarse vencer en esta despiadada guerra de las apariencias.
Fuente: People