Un hijo de la pseudo cirujana venezolana, Karla Moya, asedia al camarógrafo de N Digital, Miguel Agramonte, momentos en que buscaba su reacción, tras el Tribunal de Atención Permanente del Distrito Nacional dispusiera de tres meses de prisión preventiva, como medida de coerción.
El joven con camisa rosada y jean azul se interpone en medio del camarógrafo y su detenida madre, cuando Agramonte tomaba la imagen en el trayecto de la sala de audiencia, ubicada en el segundo piso del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva, a la celda que funciona en el cuarto piso.
El reportero gráfico reclamó al joven venezolano ¿por qué interrumpía su trabajo?, respondió de manera airada “que tenía que cortar la grabación”.
Agramonte estaba identificado con carnet y micrófono de N Digital, medio perteneciente al programa de investigación N Investiga, donde se reveló que la venezolana Moya Boada ejercía la cirugía plástica en el país de manera ilegal, lo que condujo a su sometimiento por parte del Ministerio de Salud Pública, su arresto y disposición de tres meses de cárcel como medida de coerción.
