El número de personas en la lista oficial de desaparecidos por el incendio forestal de Maui se mantenía en 385 el viernes, sin apenas cambios con respecto a la semana anterior.
En un comunicado, el Departamento de Policía de Maui y el FBI indicaron que 245 de las 388 personas que figuraban en el listado de la semana pasada habían sido localizadas y retiradas, pero se incorporó un número casi igual de nombres.
El total actualizado se desvió mucho de lo esperado: en la víspera, el gobernador, Josh Green, dijo que creía que los desaparecidos bajarían del centenar.
“Creemos que el número se ha reducido a dos dígitos, así que gracias a Dios”, había indicado Green en un video publicado en su cuenta en X, antes conocido como Twitter.
“Creemos que el número se ha reducido a dos dígitos, así que gracias a Dios”, había indicado Green en un video publicado en su cuenta en X, antes conocido como Twitter.
Tras la publicación de la nueva lista por parte de la policía de Maui, el gobernador apuntó que, en los sucesos con un gran número de víctimas, el dato de muertos y desaparecidos suele variar hasta que no terminan las investigaciones.
“Las cifras exactas van a tardar algún tiempo, quizás mucho, en concretarse”, afirmó en un comunicado distribuido por un vocero.
Según el gobernador, hay menos de 50 “casos activos de personas desaparecidas”. No ofreció más detalles, pero indicó que esas son personas de las que no se ha proporcionado más información que la mínima para entrar en la lista compilada por el FBI. Solo se necesita nombre y apellidos proporcionados por una persona con un número de contacto verificado.
Las autoridades reportaron que al menos 115 personas murieron en el incendio que arrasó Lahaina, el más letal de los registrados en Estados Unidos en más de un siglo. Por el momento se han revelado los nombres de 50 de las víctimas, y otras cinco han sido identificadas pero sus identidades no se hicieron públicas porque los familiares no han sido notificados. El resto de las identificaciones siguen pendientes.
Las llamas convirtieron la pintoresca localidad costera en escombros en cuestión de horas el pasado 8 de agosto. Las rachas de viento de hasta 97 kilómetros/hora (60 mph) hicieron que el fuego se propagase con una rapidez excepcional.
Lahaina tiene un profunda importancia en la historia hawaiana ya que en su día fue la capital del antiguo reino de Hawai, y durante siglos fue la residencia de jefes de alto rango. En las últimas décadas, había ganado popularidad como destino turístico y los visitantes comían en sus restaurantes frente al mar y se maravillaban ante un majestuoso baniano de 150 años.
La mitad de sus 12.000 residentes viven ahora en hoteles y alquileres vacacionales de corta duración. La Agencia de Protección Ambiental dirige la limpieza de los residuos peligrosos en la zona quemada, que abarca unos 13 kms cuadrados (5 millas cuadradas).
Se espera que la reconstrucción tarde varios años y tenga un costo de miles de millones de dólares.
En un primer momento se creía que había más de 1.000 desaparecidos, en base a los reportes de familiares, amigos o conocidos. Pero las autoridades redujeron el listado a 388 casos creíbles que se dieron a conocer la semana pasada.