La reducción de horas laborales es un tema que se ha estado debatiendo a nivel internacional, y que en algunos países ya es una realidad.
Hay muchas variables, desde los que proponen reducir la cantidad de dias laborales y otros las jornadas diarias, lo que si es que ya es una tendencia en la que el tiempo es un valor tan preciado como el salario.
¿A qué nivel está en República Dominicana esa iniciativa? el programa N Investigación Periodística, realizó un reportaje para dar respuesta a esta interrogante.
Esta tendencia ha tenido acogida sobretodo en algunos paises de Europa, donde ya hay empresas que han instaurado el modelo de 4 días a la semana, paises como Islandia,Irlanda, Alemania, Belgica y España en algunas empresas han implementado este modelo. También se conoce el caso de Microsof Japón, donde se implementó en el 2019, logrando un aumento del 39,9 de su productividad.
En ese sentido, el presidente de la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS), Pepe Abreu, explicó que la tendencia que se está viendo en los tratadistas del derecho más avanzado del mundo es ser proclive a la disminución de la jornada.
Y es que el mundo actual con los avances de la tecnología, ayudan a que trabajos que necesitaban más tiempo, hoy día se hagan en menos, o incluso se puedan hacer a distancia, lo que permite que el cambio de mentalidad se de más rápido y que los actores en el ejercicio del trabajo puedan flexibilizar.
La psicóloga Rafaela Burgos explicó a N Investigación Periodística que reduciendo tal vez la jornada de una manera progresiva o con mediciones, “es posible que se puedan ir dando, viendo, observando qué nivel de productividad esto va generando al mismo tiempo que se ve el efecto en la capacidad del empleado para comprometerse más con su empresa, para vincularse de manera más más a largo plazo”.
De acuerdo a un reportaje del periódico El País, la empresa Delsol, en España, tiene algunos datos ya para defender su estrategia. Dos años y medio después de poner en marcha la semana de cuatro días, las encuestas entre los empleados y los clientes indican una clara mejora de ambiente laboral y de la calidad del servicio con aumento de la facturación en un 20%.
Estamos en una época en la que además del dinero, un bien que aprecia la mano de obra cualificada, es la flexibilidad en su tiempo, estamos frente a una generación con altos niveles de rotación, con miras a buscar el bienestar en y fuera del trabajo.
“Hoy el trabajador de hoy calcula y cuando ve que un trabajo, por ejemplo, es muy extenuante, con pocos resultados, le obliga, por ejemplo a a disminuir su condiciones de salud fácilmente. Pese a lo difícil contradictoriamente que es conseguir un trabajo, pero vacila poco en tratar de cambiar de empleo o irse inclusive a la informalidad en aras de no asumir un horario que pueda ser esclavizante”, manifestó Pepe Abreu.
Entre las ventajas que han expresado los empleados que trabajan bajo el modelo de 4 dias a la semana, es poder lograr mayor bienestar en la salud mental al poder además de ser productivos compartir con la familia.
En ese sentido , la psicóloga Burgos reveló que es muy probable que un empleado esté más a gusto en su empresa, en su ambiente de trabajo, si además puede hacer lo que se llama conciliación, “es decir, tener otras cosas, tener una, unas, unos intereses y una vida al margen del trabajo más satisfactorio y que el trabajo se lo permita”.
También el hecho de estar más descansados pudiera incidir en la reducción de accidentes en lugar de trabajo lo que puede impactar de manera positiva los programas de salud de los paises.
Rafaela Burgos agregó que podría tratarse de una iniciativa interesante que, por un lado de nuevo genere un mejor bienestar, un mayor bienestar en el empleado y una mejor motivación para el trabajo.
Pero para todos el modelo, no es color de rosa, se ha establecido, estudios como el de la Universidad de Auckland en Nueva Zelanda, que el hecho de tener la misma carga laboral en menos tiempo y en algunos casos el aumento de la jornada del día con 90 minutos por día y 30 minutos menos de hora de almuerzo, desarrolló estrés en empleados al linicio de establecido el nuevo modelo en algunas empresas.
En el caso dominicano, la Asociación de Jovenes Empresarios ve algunos factores que no favorecen la adopción del modelo en el país.
Jaime Senior, presidente de ANJE, dijo que en la República Dominicana prácticamente el 50% y quizás más de la economía es informal. “Entonces, hablar de una de unos estudios limitados en otros países que tienen otra realidad social, otra realidad económica, no creo que son comparables para la República Dominicana. Lo que nosotros tenemos que abogar y tratar de lograr es primero formalizar la economía, que es informal, para de esta forma tener las bases sociales para hablar de mejoras que pueden haber en toda la cadena productiva”.
Y aunque estarían de acuerdo para la flexibilización del trabajo en República Dominicana, entienden que son modelos que se han desarrollado en paises con economias más robustas, que la nuestra, donde entre otras cosas, aún nos falta abogar por reformas en nuestro código laboral profundas para poder dar ese paso.
“Nosotros tenemos un Código Laboral que data de 1992 y que asume que todos los empleados son operarios de maquinaria o jornaleros agropecuarios, que no es la realidad de nuestro país en la actualidad. Entonces, en vez de estar buscando parches, en vez de estar realizando cambios puntuales que pueden tener impactos negativos a lo que nos debemos abocar, es una visión y revisión integral de lo que queremos como mercado laboral”, explicó Jaime Senior.
No obstante Las centrales sindicales tienen este tema como parte de los cambios que necesita el código laboral.
Pepe Abreu afirmó que en la próxima semana tienen una discusión para continuar el proceso de intercambio sobre la modificación que hay que hacerle al Código, los ajustes, la modernización, como dicen algunos, y ahí ese tema estará incorporado.