Un grupo de migrantes, incluidos mujeres y niños, de Oriente Medio y África, están atrapados en la frontera entre Polonia y Bielorrusia, informó el lunes la guardia fronteriza polaca, mientras activistas reclaman que se les impide buscar asilo.
El grupo ha tenido que acampar durante cuatro días en el bosque cerca de Bialowieza, en la cerca fronteriza que Varsovia levantó para impedir los cruces irregulares.
La guardia fronteriza polaca dijo en un comunicado enviado a AFP que “alrededor de 20-30 personas” estaban “fuera de la jurisdicción” de Polonia.
“Por lo tanto, cualquier actividad administrativa, incluida la posible aceptación de un pedido de protección internacional, si la intención de estas personas es obtener protección en Polonia, no es posible”, agregó.
Según activistas, el grupo incluye personas de Siria, Irak y Congo, con 11 niños.
“Están muy cansados, estresados (…) por estar en una situación muy difícil e incierta”, declaró a AFP la activista Ola Chrzanowska.
El organismo de derechos humanos Grupa Granica aseguró que los migrantes ya están en territorio polaco pese a no haber cruzado la cerca.
Advirtió que no se les permite regresar a Bielorrusia, donde la guardia fronteriza los amenaza con perros, y aseguró que al menos dos personas fueron golpeadas o heridas por oficiales del lado bielorruso.
Chrzanowska indicó que los activistas presentaron una solicitud a la Corte Europea de Derechos Humanos para pedir “medidas temporales” y exigir que Polonia reciba sus peticiones de asilo del grupo.