Los días no laborables o de fiesta que envuelve a celebraciones de la Iglesia Católica en la República Dominicana son cuestionados en el más reciente informe del Departamento de Estado de Estados Unidos.
En el informe “República Dominicana Informe Internacional de Libertad Religiosa 2022”, el Departamento de Estado estadounidense cataloga estos días no laborables como uno de los tantos privilegios que obtiene el catolicismo en la nación caribeña.
Recogiendo testimonios de otros grupos religiosos, llamados en el informe como grupos no católicos, se determina que no hay un solo feriado en el calendario que tenga que ver con otras denominaciones religiosas.
En el país el 21 de enero es no laborable por el Día de Nuestra Señora de la Altagracia, mientras que cada año el Viernes Santo también es feriado en conmemoración a la muerte de Jesucristo.
También, en junio el primer jueves de ese mes se celebra Corpus Christi (El cuerpo de Cristo) y también es no laborable, siguiendo con el 24 de septiembre que es feriado por el Día de Nuestra Señora de las Mercedes.
Los días no laborables en torno al catolicismo culminan el 25 de diciembre, día que se celebra el nacimiento de Cristo.
Una particularidad de los días de fiesta relacionados con el catolicismo en la República Dominicana es que son días inamovibles, a los que no se le busca el famoso “puente” cuando no caen viernes o lunes.
“Los días festivos reconocidos a nivel nacional también incluyen días que tradicionalmente solo observan los católicos”, dice el informe.
A través del referido informe, los líderes de otras denominaciones propusieron que para responder mejor a todos los grupos religiosos, el gobierno debería abrir un departamento de asuntos religiosos en lugar de trabajar a través de enlaces con diferentes denominaciones cristianas.