Cuando acudes a un espectáculo, en un gran escenario y con uno varios artistas famosos, sea por trayectoria, o por pegada de momento, todo suele salir bien, pero para lograrlo, se requiere de muchos recursos, personal, creatividad, profesionalidad, experiencia, mercadeo, publicidad y contrataciones de equipos para los cuales, hay que contar con bolsillos bien apretados.
Aproximadamente se requiere de dos meses para montar un buen espectáculo con artistas locales, básicamente orquestas de salsa, merengue y urbanos, o si se trata de una trayectoria, como por ejemplo: los 35 años de la Coco Band o los 50 años del Conjunto Quisqueya.
Para la realización de este trabajo fue consultado Rafael Taveras, quien acumula más de 37 años de experiencia como productor de eventos multitudinarios y en grandes escenarios.
Ha producido más de 14 versiones del Festival del Merengue, 12 Roncierto Brugal, 68 conciertos en el Teatro La Fiesta del Hotel Jaragua, nueve en Altos de Chavón, 12 en el Palacio de los Deportes y uno en el Félix Sánchez. Además de los programas televisivos: Sábado de Corporán, La Súper Tarde, El Escándalo del 13 y otros.
Por sus manos han pasado las presentaciones de artistas de la talla Andrés Cepeda, José José, José Feliciano. Salseros de las dimensiones del Grupo Niche, Oscar de León, Tito Nieves, Tito Rojas Gran Combo, Jerry Rivera, además de las más tradiciones agrupaciones de salsa, merengue y bachata de RD.
Se tomó en cuenta para los presupuestos aproximados, un escenarios estándar, como lo es el Teatro la Fiesta del Hotel Jaragua, con capacidad para mil 200 personas y cuenta con sonido básico, al igual que luces y tarima.
COSTO DE PRODUCCIÓN. Taveras indaca que varían mucho los precios en alquileres de locales, sonido, luces y contrataciones de técnicos, pues dependerá del escenario y de las conexiones que tenga el productor. En ese sentido, en promedio los precios rondan, dela manera siguiente:
El alquiler de un local: alrededor de cinco mil dólares y si incluye la barra (venta de bebida) pues llegaría a los 10 o 12 mil dólares.
Tarima (si se requiere) entre los 100 mil, hasta un millón de pesos.
Luces (si es para reforzar o se parte desde cero), va desde 300 mil pesos, que es lo básico, hasta dos millones de pesos.
Sonido: Entre 75 mil y 700 mil pesos.
Los artistas dependerán de si hay que contratarlos, que en el caso de las orquestas de salsa y merengue premium van desde 500 mil hasta un millón 200 mil pesos.
Costos general promedio: cuatro millones de pesos (RD$4,000,000).
EL RODAJE. Taveras explicó que se requiere alrededor de dos meses para la carpintería de montar un evento con calidad y donde intervienen eficientemente alrededor de 20 individuos, dependientes del productor general, productor ejecutivo, productor musical y los técnicos.
La producción ejecutiva, es prácticamente el dueño del evento, el que paga a los que intervienen y el responsable de que estén todas herramientas que se necesiten.
Es responsable de las relaciones públicas (media tours), la publicidad, patrocinio y la parte comercial. Se hace acompañar de un periodista y un mercadólogo.
La producción general, es el arquetipo del espectáculo y está en la cima de la genealogía del evento. Se encarga de la correcta distribución de audio, luces y pantallas. Normalmente se coloca al frente del escenario con la consola madre, denominado front.
Le corresponde desarrollar el guión, las imágenes de apoyo en las pantallas, conforme a la evolución de la temática, si existe un homenaje, si hay artista invitado, el juego de las luces, donde enfocar y sus tonalidades.
“Es la cabeza de los otros departamentos: del productor artístico, del encargado de logística y de saber que todas las necesidades estén cubiertas”, sostuvo el destacado productor.
Director artístico, se ubica en el front y es el encargado de dar seguimiento del guión establecido por el director general para que todo acontezca como fue planeado y producido en el escenario.
Taveras explicó que normalmente trabaja de la mano con el o los artistas para definir lo relativo a que se hará con cada canción y los elementos en los que puede o no intervenir.
El coordinador, está en el escenario garantizando la parte operativa, el desarrollo del evento. Su misión es que no se escape ningún detalle.
Enlace, es la persona que está entre el coordinador que está en el escenario y el productor (front)
Equipo A y B, es el encargado de alimentación, bebida, hidratación o cualquier otra casa que desee el artista.
Responsable de camerino, quien garantiza que esté todo lo necesario en cuanto a maquillaje, vestuario y demás.
Conducción músico, responsable de llevar los músicos y los artistas al escenario.
Eventualidad, existe un individuo para atender a las eventualidades: falta de un equipo, guión, cualquier imprevisto que surja.
Los técnicos. Aquí intervienen más personas y son los responsables de que todo funcione bien.
Tavera explicó que hay un sonidista ubicado en el front, al lado del productor general o del artístico. Básicamente opera la consola de monitores.
Hay otros sonidista, con otra consola ubicada en tarima y centrado en micrófonos. Trabaja junto a dos o tres asistentes especializados en hacer ajustes: si se desconecta un cable, falla un micrófono u otra situación.
Luminotécnico, cuenta con un operador para la consola, pero cuenta con alrededor de cuatro a cinco personas para el montaje.
Operador de pantalla, que también lo hace una persona, pero para el montaje requiere de un mínimo de seis individuos.
Efecto pirotécnico, alrededor de tres individuos que se encargan de operar las máquinas de volcanes (fuego), humo, voltajes, destellos.
Bailarines, regularmente de tres a 10 parejas, normalmente participan en cinco temas básicos con coreografías bien definidas, aunque podrían entrar y salir en otras canciones.
LOS ENSAYOS. Alrededor de dos a tres días se requiere para los ensayos de la orquesta en tarima y si es necesario reforzar la banda para mejor sonido.
“Como son profesionales y saben leer música, no requieren de mucho esfuerzo para acoplarse a los temas. Además que casi siempre se lo saben”, manifestó.
Se repite cuantas veces sea necesario hasta lograr una especie de perfección musical para que todo fluya con nitidez
Este es el resultsado.
Taveras explicó que montar el escenario te lleva varios días, pero buscar imágenes de apoyo, fotografías y proyecciones en pantalla, te lleva meses.
Destacó que en el caso de un artista extranjero y requiere del acompañamiento de músicos locales, entonces: el productor musical se adelanta para realizar alrededor de cinco ensayos.
“Los guiones de un artista extranjero se desarrollan por minutos y ahí viene el nombre de minutado. Llevan meses de ensayos”, puntualizó el productor.
Así de desolado y amplio luce el lugar del evento cuando está vació y te llega la incertidumbre de si será exitoso o un fracaso. En este caso, el escenario es el Coca-Cola Music Hall de Puerto Rico, con capacidad para tres mil 500 personas; todo un reto.
Cuando el evento es exitoso, como fue el concierto de “50 años de Leyendas”, amenizado por las orquestas merengueras dominicanas de Fernando Villalona y el conjunto Quisqueya, entonces: así luce el Coca-Cola Music Hall. Las sonrisas no desaparecen en los labios de artistas y sus productores, sino…. Pregúntele a Amable Valenzuela.
DIFERENCIA ENTRE FIESTA, ESPECTÁCULO Y CONCIERTO.
Una fiesta, es lo más sencillo y no requiere de mucha producción: un lugar, no muy espacioso, una tarima, equipo de sonido y su duración es de una hora 15 minutos, si es una orquesta de merengue o salsa y 45 minutos para un artista urbano.
Concierto, preferiblemente conlleva un lugar cerrado y más elementos de producción, como cambio de vestuarios, bailarines, pantallas gigantes, luces. “No necesariamente debe coordinarse con el artista, quien hace su parte y la producción coloca esos elementos adicionales”, manifestó.
El espectáculo, es diferente, porque implica muchos elementos coordinados con el artista. Si es exigente, va querer una nave industrial y montar una tarima tal cual como la producción defina, con pantallas, juego de luces y cámaras y se ensaya por meses, dos, tres o cuatro.