El horror en la vida del futbolista Amir Nasr Azadani no se terminó, pero al menos pudo evitar una posible ejecución en la horca, como había trascendido: así, el jugador recibió una condena de 26 años de cárcel, tras hacerse público su apoyo a las mujeres de su país y que implicó que fuese la portada de varios medios del mundo en medio de la disputa de la Copa del Mundo de Qatar 2022.
Según los medios internacionales Nasr Azadani enfrentó un juicio sin garantías, al igual que el resto de acusados por las manifestaciones contra el Gobierno iraní, y fue condenado por el supuesto asesinato de tres miembros de las fuerzas de seguridad nacionales y por unirse a las protestas en favor de las mujeres que comenzaron el 16 de septiembre tras la muerte de Mahsa Amini, detenida por la Policía de la moral por violar el código de vestimenta islámico.
La condena del futbolista provocó la reacción contundente de diferentes organizaciones y jugadores famosos de todo el mundo, que pudieron finalmente influir en el cambio de pena.
Si bien Nasr-Azadani ha recibido una condena durísima de 26 años de prisión, la Justicia iraní no se detiene y condenó a muerte este lunes a tres personas acusadas de matar a varios agentes de Policía durante las protestas antigubernamentales. Estas condenas, que pueden ser todavía apeladas, ya acumula a 17 el número de personas condenadas a muerte en relación con las manifestaciones, que comenzaron hace ya más de tres meses.
De estas sentencias, cuatro se han ejecutado y otras dos se encuentran a la espera después de que el Tribunal Supremo rechazara las apelaciones presentadas. Ahora, la Justicia iraní senaló que Salé Mirhashemi, Mayid Kazemi y Said Yaqubi fueran condenados también por cometer un «delito contra Dios», conocido como ‘moharebé’, de acuerdo con el Código Penal islámico.
Otras dos personas también fueron condenadas por las acciones del 16 de noviembre último, cuando tres miembros de las fuerzas de seguridad murieron durante un incidente registrado en las protestas en Isfahán, cuando aseguran que se encotraba el futbolista iraní, condenado a 26 años de cárcel. Nasr-Azadani fue imputado por pertenecer a un grupo ilegal e incurrir en delitos contra el orden público, reunirse y conspirar para vulnerar la seguridad del país, además de cometer “moharebé”, según consigna la cadena Iran International.
El caso de este futbolista se volvió viral y provocó críticas en todo el mundo cuando asociaciones de futbolistas y medios internacionales cuando se anunció que había sido condenado a muerte.
Irán está en el medio de protestas desde la muerte de Mahsa Amini, tras ser detenida por la Policía de la moral por no llevar bien colocado el velo. Pero los reclamos crecieron y ahora los manifestantes piden el fin de la República Islámica fundada por el ayatolá Ruholá Jomeiní en 1979. Al menos 2000 personas fueron acusadas por la Justicia iraní de diversos delitos por su participación en las movilizaciones, 17 condenadas a muerte y cuatro han sido ejecutadas.