Ha llegado sin sorpresas: a las tres de la tarde (hora local) y con referencias a Isabel II en la primera Navidad sin ella. Carlos III se ha dirigido al Reino Unido con un discurso televisado que, según la prensa británica publicó y el palacio no desmintió, estaba grabado desde el pasado 13 de diciembre. Es decir, cuatro días después de que Netflix estrenara los tres primeros capítulos de la docuserie con la que Harry y Meghan reabrieron la guerra con la Familia Real británica.
El imborrable recuerdo a su madre, Isabel II
El soberano y toda la familia Windsor siguen de esta forma con el plan trazado y la vista puesta en el próximo 6 de mayo, día en el que los reyes Carlos y Camilla serán coronados en la Abadía de Westminster. En el que ha sido su primer mensaje navideño como monarca, el jefe de Estado ha homenajeado a su madre -fallecida el pasado septiembre- tal y como se esperaba.
De pie, en el coro de la capilla de San Jorge del castillo de Windsor, el Rey ha recordado la profunda creencia que tenía Isabel II en Dios, “la luz eterna”, y en la bondad de la gente para ayudar a los demás. “Era una parte esencial de su fe, pero también de su confianza en las personas, y eso es algo que comparto con todo mi corazón”, ha subrayado.
Carlos III se refería a “la extraordinaria capacidad de cada uno para tocar, con bondad y compasión, las vidas de los demás y hacer brillar una luz en el mundo que les rodea”, señalaba el monarca, que hoy está pasando la Navidad en la residencia de Sandringham con sus familiares más cercanos.
Agradecimiento a todos los que cuidan de pueblo británico
Por otro lado, el Rey ha resaltado la dedicación de las fuerzas armadas y los servicios de emergencia que “trabajan incansablemente” para mantener a la población “a salvo”, así como “los profesionales de la salud y la atención social, nuestros maestros y, de hecho, todos aquellos que trabajan en el servicio público, cuya habilidad y compromiso están en el corazón de nuestras comunidades”, afirmaba.
El monarca reconoce a su vez las penurias que pasa mucha gente a causa de conflictos, hambrunas o desastres naturales, así como de aquellos que ponen su granito de arena en medio de esta crisis. “Quiero rendir homenaje a todas aquellas personas que generosamente dan alimentos o donaciones, o el bien más preciado de todos, su tiempo, para apoyar a quienes les rodean”, ha dicho.
“Nuestras iglesias, sinagogas, mezquitas y templos se han unido una vez más para socorrer a los hambrientos, brindándoles amor y ayuda durante todo el año. En este sentido, el monarca ha recordado la visita que hizo hace unos años a la ciudad de Belén, lo que para él supuso “cumplir un sueño que tuve toda mi vida”.
“Si bien la Navidad es, por supuesto, una celebración cristiana, el poder de la luz que vence a la oscuridad se celebra más allá de los límites de la fe y las creencias”, ha remarcado. “Así que, sea cual sea la fe que tengas, o no la tengas, es en esta luz que da vida, y con la verdadera humildad que se encuentra en nuestro servicio a los demás, que creo que podemos encontrar esperanza para el futuro”, subrayaba el monarca.
Carlos III grabó su discurso junto a un gran árbol de Navidad, decorado con materiales sostenibles, como papel y vidrio, y productos naturales como piñas. Durante sus años como príncipe de Gales, Carlos III, de 74 años, expresó de manera regular su preocupación por la amenaza al medio ambiente y trabajó para unir a los gobiernos y al sector público y privado para encontrar soluciones a la crisis del cambio climático.
Fuente: Hola.com