Las protestas desatadas en Perú tras la destitución y arresto del expresidente Pedro Castillo -que intentó disolver el Congreso y establecer un gobierno de excepción- han dejado una veintena de muertos en la última semana, según cifras del Ministerio de Salud.
En una actualización publicada la tarde de este viernes en su cuenta de Twitter, la autoridad sanitaria contabilizaba 20 muertos y 63 hospitalizados.
Desde la salida de Castillo el 7 de diciembre, las protestas se han extendido por todo el país, pero han sido especialmente violentas en algunas zonas del interior. En otros casos se expresaron de manera pacífica.
La situación actual propició las primeras dimisiones en el gabinete de la actual presidenta Dina Boluarte.
La ministra de Educación, Patricia Correa, presentó este viernes su renuncia con el argumento de que la muerte de compatriotas en las protestas sociales “no tiene justificación alguna”.
Poco después siguió la dimisión del ministro de Cultura, Jair Pérez Brañez, por las mismas razones.
Este mismo viernes, tras una larga sesión que había arrancado el jueves, el Congreso no aprobó el proyecto de ley para adelantar las elecciones.
Si bien 49 congresistas votaron a favor del proyecto de reforma constitucional que proponía el adelanto electoral, 33 lo hicieron en contra y 25 se abstuvieron, por lo que no salió adelante.
La propuesta planteaba realizar los comicios en diciembre de 2023, acortando así el mandato de Boluarte, a quien le correspondió asumir la Jefatura de Estado para culminar el periodo presidencial para el que fue electo Castillo y que finaliza a mediados del 2026.