Rusia debe asumir su responsabilidad por los daños ecológicos provocados por la guerra en Ucrania, declaró el lunes por la noche en la COP27 el ministro ucraniano de Medio Ambiente, Ruslan Strilets.
Con el objetivo de obtener una compensación, Kiev lanzará una plataforma de evaluación de daños contra el medio ambiente provocado por las operaciones militares, explicó durante una rueda de prensa al margen de la 27ª conferencia internacional sobre el clima, en Sharm el Sheij, Egipto.
“Rusia debe ser considerada responsable no solo respecto a Ucrania sino respecto a todo el mundo”, declaró Strilets.
Con esa plataforma, el gobierno ucraniano aspira a “unificar los enfoques de la evaluación de daños a escala internacional” y “reforzar la cooperación en la reparación” de estos, precisó.
“Pero el principal desafío, y somos conscientes de ello, es que nos será muy difícil pleitear en justicia por cada daño medioambiental” ocasionado, añadió.
Las emisiones directamente causadas por los combates se estiman en 33 millones de toneladas equivalentes a CO2 y las que deberían ocasionarse a raíz de las labores de reconstrucción de las infraestructuras y de los edificios destruidos, en 49 millones de toneladas, precisó el ministro.
Según él, ya se reportaron más de 2.200 daños al medio ambiente, como bosques arrasados, tierras de cultivo y ríos contaminados.
Kiev ya alertó en julio a los ministros europeos de Medio Ambiente, los cuales prometieron que sus países ayudarían a Ucrania a paliar esos daños ecológicos.
