A poco más de un mes de las legislativas estadounidenses, demócratas y republicanos ondearon este viernes amenazas claras: el riesgo para la democracia que según los primeros supondría la victoria republicana, y el peligro económico que para estos últimos implicaría mantener a los otros en el poder.
“Esta es la cuestión en 2022: ¿la gente por encima de la política, menores costos, trabajos mejor pagados y comunidades más seguras, o el extremismo MAGA?”, dijo este viernes el “número dos” de los demócratas en la Cámara de Representantes, Steny Hoyer, en un discurso en Pensilvania.
MAGA es el acrónimo de “Make America Great Again” (Hagamos a Estados Unidos grande de nuevo), el eslogan de campaña y de la Presidencia de Donald Trump (2017-2021) y, a juicio de los demócratas, quienes se acogen a él debilitan los cimientos de la democracia en el país.
Para Hoyer, la hoja de ruta republicana “tiene muchos eslóganes y pocos detalles. Esto es porque los verdaderos detalles de su agenda son demasiado aterradores para la mayoría de votantes estadounidenses”.
El 8 de noviembre están en juego un tercio de los escaños del Senado y los 435 puestos de la Cámara de Representantes. Actualmente los demócratas gozan de una ajustada mayoría en el primero y controlan la segunda.
“En los últimos dos años, nuestra mayoría demócrata en la Cámara de Representantes se ha centrado en poner a la gente por encima de la política para lograr resultados”, añadió Hoyer en Pensilvania, un estado clave en los comicios, donde Joe Biden ganó las presidenciales de 2020 y Trump las de 2016.
El bando progresista confía en que los logros obtenidos por la Administración de Biden lleven a los electores a su favor: desde la Ley para la Reducción de la Inflación hasta la que prevé subsidiar con 52.700 millones de dólares la fabricación nacional de microchips y fortalecer la cadena de suministro para hacer frente a la competencia china.
Desde que el Tribunal Supremo derogara en junio la protección federal del derecho al aborto, la interrupción voluntaria del embarazo se ha convertido en uno de los temas principales de la campaña.
“Los diputados republicanos rechazan comprometerse a proteger el acceso a la anticoncepción o el matrimonio entre personas del mismo sexo, que el Supremo ha puesto en riesgo”, añadió el dirigente demócrata en su intervención ante miembros del sindicato de trabajadores del metal United Steelworkers.
En ese mismo estado, el líder de la minoría republicana en la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, advertía de que una nueva legislatura de mayoría demócrata en ambas cámaras perjudicaría tanto la seguridad nacional como al bolsillo ciudadano.
“No tienen ningún plan para arreglar todos los problemas que han creado. Nosotros queremos una economía fuerte. Eso significa que puedas llenar el depósito, que puedas hacer la compra, que tengas suficiente dinero para ir a Disneylandia y ahorrar para un futuro en el que las nóminas aumenten”, sostuvo.
El plan republicano para el país, añadió McCarthy, se asienta en la libertad y en una mayor seguridad, frente a las lagunas que a su juicio hay en la actual frontera sur: “Millones de personas se cuelan. Gente en la lista terrorista”.
Criticó que los precios hayan subido tanto que en el día a día es como si los trabajadores hubieran dejado de recibir una nómina al año. No obstante, aunque la inflación alcanzó en junio su cifra más alta en cuarenta años, el 9,1 %, en julio bajó hasta el 8,5 % y en agosto otras dos décimas, al 8,3 %.
La votación anticipada para los comicios comenzó este viernes en algunos distritos. De momento, según un sondeo de esta semana de la consultora Morning Consult, los demócratas mantienen una ligera ventaja de cuatro puntos respecto a los republicanos, con el 48 % de las intenciones de voto.
EFE