La famosa celebración de Año Nuevo en Times Square, Nueva York, se reducirá drásticamente por la pandemia, anunció el jueves el alcalde Bill de Blasio, en momentos en que la variante ómicron alimenta una “asombrosa” escalada de casos de covid-19.
Típicamente unos 58.000 neoyorquinos se reúnen para presenciar la caída de la enorme bola anunciando la llegada del nuevo año, pero la próxima semana la capacidad será reducida a 15.000 asistentes, que deberán usar obligatoriamente mascarilla y probar que han sido vacunados.
Medidas sanitarias adicionales “mantendrán segura y sana a la multitud completamente vacunada mientras recibimos el Año Nuevo”, apuntó de Blasio.
Times Square estuvo prácticamente vacía en la víspera de Año Nuevo del año pasado, y solo los trabajadores esenciales e invitados pudieron ver caer la pelota desde áreas con distanciamiento social.
Varias ciudades del mundo como París y Londres han cancelado sus festividades para recibir el Año Nuevo ante el avance de la nueva variante ómicron del coronavirus.
Nueva York reportó un “asombroso” número de nuevos casos de covid, casi 11.000, a lo largo de los cinco distritos de la ciudad el miércoles, señaló el alcalde.