AFP Noticias.- La misteriosa marea negra que causó un desastre ambiental a lo largo de más de 2.000 km de costa brasileña entre agosto de 2019 y marzo de 2020 fue causada por una embarcación de bandera griega, informó este jueves la Policía Federal (PF) tras dos años de investigación.
La policía “concluyó que hay pruebas suficientes de que un navío petrolero de bandera griega habría sido el responsable de lanzar la sustancia oleosa”, que afectó a más de mil localidades en 11 estados del litoral, indicó en un comunicado, sin detallar el nombre de la empresa propietaria de la embarcación.
En noviembre de 2019, las autoridades brasileñas señalaron al petrolero griego Bouboulina, propiedad de la empresa Delta Tanker, del mismo país, como “el principal sospechoso” de la marea negra.
Pero en la época Delta Tankers negó “toda responsabilidad” en la catástrofe ambiental, que amenazó manglares, santuarios para ballenas jorobadas, arrecifes de corales y numerosas playas en ciudades costeras del noreste, región pobre cuya economía es altamente dependiente del turismo.
“Solo los costos arcados por poderes públicos federales, estatales y municipales para la limpieza de playas y el océano fueron estimados en más de 188 millones de reales (47,7 millones de dólares a la cotización promedio de 2019)”, indicó la PF.
Precisó que aún realiza investigaciones para establecer el valor total del daño ambiental causado.
Durante el desastre, el gobierno del ultraderechista Jair Bolsonaro, muy criticado por su política medioambiental, movilizó unos cinco mil soldados para las operaciones de limpieza y se recolectaron más de 4.500 toneladas de residuos de petróleo.
Cientos de pobladores voluntarios también ayudaron a retirar las sustancias.
La PF detalló que la investigación se enfocó en tres aspectos: determinar el tipo y origen del material derramado; el lugar exacto del “derrame/lanzamiento”; y la investigación de hechos, a través de la “cooperación nacional internacional, inclusive con apoyo da la Interpol”.
La empresa propietaria de la embarcación y sus representantes legales, así como el capitán y el jefe de máquinas del buque, “fueron acusados de los delitos de contaminación, incumplimiento de las obligaciones medioambientales y daños a reservas naturales”, agregó la policía.
Tras la investigación policial, le corresponde a la justicia y a la Fiscalía de Rio Grande do Norte (noreste) adoptar las medidas correspondientes contra los responsables.