El presidente de Rusia, Vladimir Putin, informó que recibió una tercera dosis de la vacuna rusa contra el coronavirus, en su modalidad Sputnik Light.
“Hoy, por recomendación suya, me puse la vacuna Sputnik Light, me revacuné”, señaló en una reunión con el vicedirector del Centro Gamaleya, desarrollador del preparado y de Spuntik V, Denís Logunov.
Previamente, el mandatario recibió la pauta completa de la vacuna original Sputnik V a principios de 2021, informa la agencia de noticias RIA Novosti.
Tras una reunión con Logunov, Putin destacó que se siente bien después de la inyección, y recomendó el tratamiento como el método más eficaz para protegerse del coronavirus y para evitar síntomas graves en caso de contraer la enfermedad.
El presidente ruso también se ofreció como voluntario para participar en las pruebas de una vacuna nasal contra la COVID-19.
“¿Puedo participar en el experimento?”, pregunto el mandatario a Logunov, quien le respondió: “ciertamente” y le pidió firmar el documento de consentimiento necesario.
“Lo firmaré definitivamente. Quizás incluso hoy”, afirmó Putin.
El Fondo Ruso de Inversión Directa (FIDR), que comercializa los preparados rusos en el exterior, asegura que Sputnik Light tiene a su vez una eficacia del 96,3 %.
Moscú promueve su uso como un “refuerzo universal eficaz” para las vacunas producidas por AstraZeneca, Sinopharm, Moderna y CanSino.
El país superó este domingo la barrera de los 9,3 millones de casos de coronavirus desde el inicio de la pandemia y enlazó un cuarto día por encima de los 1.250 muertos, en medio de un repunte de las cifras durante las últimas semanas.
Aunque el país dispone de varias vacunas de desarrollo propio, solo 36,7% de la población rusa está completamente inmunizada, según el sitio especializado Gogov.
El centro operativo nacional para la lucha contra el coronavirus señaló que durante las últimas 24 horas se registraron 36.970 contagios y 1.252 fallecidos, lo que sitúa las cifras totales an 9.331.158 y 264.095, respectivamente.
De esta forma, la cifra de casos continúa estabilizada y en ligero descenso durante los últimos días, tras los máximos registrados entre finales de octubre y principios de noviembre, si bien la cifra de decesos roza el récord, fijado el sábado con 1.254 finados.
Según la agencia de estadísticas Rosstat, que aplica un método más amplio de cálculo, el balance total de la pandemia en Rusia era de cerca de 450.000 muertos a fines de septiembre.
Opuesto a la vacuna obligatoria, Putin apoyó ese tipo de medidas para algunas regiones y ciertas categorías de ciudadanos.
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