Reino Unido concederá hasta 5.000 visados de manera temporal para atraer a camioneros extranjeros, ante la creciente escasez debido a la pandemia y al Brexit, estimada en 100.000 conductores, que afecta ahora al suministro de combustible, informaron este sábado los medios británicos.
Esta medida exhibe un cambio radical del primer ministro, Boris Johnson, cuyo gobierno ha endurecido las reglas de inmigración tras la salida del país de la Unión Europea y reiterado la necesidad de acabar con la dependencia de la mano de obra del exterior.
Sin embargo, los desabastecimientos causados por la falta de conductores, que golpean al sector agroalimentario, pero también al energético, provocando el cierre de varias gasolineras, han empujado al ejecutivo a tomar medidas.
En los últimos días, se han formado enormes colas frente a los surtidores de gasolina, donde los británicos que ignoran los llamamientos del gobierno a la calma se están abasteciendo de combustible.
“Solo quiero repostar para ir al trabajo. La gente está llenando bidones, es ridículo”, lamenta Mike Davey, un conductor de 56 años que ha estado esperando más de media hora en una estación de servicio en Kent, al sureste de Londres.
Frente al aumento de las colas, Downing Street señaló el viernes que el gobierno “estaba considerando medidas temporales para evitar problemas inmediatos”.
Cualquier medida sería “muy estrictamente limitada en el tiempo”, subrayó un portavoz de Johnson, al mismo tiempo que aseguró que el país tiene “amplios depósitos de combustible” y que “no hay escasez”.
Una afirmación que dejó a los conductores escépticos el sábado por la mañana. “Quizás deberían traer algunos conductores del ejército”, sugiere Davey.
De hecho, se han efectuado varios llamamientos para desplegar soldados para ayudar a distribuir gasolina o hacer frente a la acumulación de solicitudes de permisos de conducir vehículos pesados, que aumentó durante la pandemia.
Por Infobae
