Debido al alza de los precios de la carne de pollo y a raíz de lo que muchos consideran es una especulación por la baja en la demanda de los productos derivados del cerdo, amas de casa se ven en la necesidad de hacer malabares para alimentar a la hora de preparar el almuerzo.
Con el entendido de que el pollo es la principal carne de consumo de los dominicanos, en muchos hogares buscan otras opciones para comer al mediodía, que generalmente va acompañado de arroz con habichuela roja, quedando así en riesgo el denominado plato criollo conocido como “la bandera”.
En tiempos en que la crisis sanitaria se ha extrapolado a otras industrias, Aleida Reinoso, una ama de casa residente en Los Ríos, en el Distrito Nacional, narró a N Digital que su “refugio” ante la ausencia de la carne de pollo por los altos precios es la berenjena, salami con huevo y otras veces tuna.
Reinoso asegura, además, que tiene que combinar la denominada “compaña” con vegetales y otros agregados, sintiendo así los efectos de la especulación que existe con la carne del ave, que tiene orígenes en la peste porcina africana, registrada en unas 14 provincias del país, hasta ahora.
La joven, que tiene un negocio de venta de empanadas venezolanas, contó que antes compraba una pechuga de pollo como parte del relleno para dichos productos que le costaba unos 200 pesos, dependiendo el tamaño, mientras que ahora debe pagar cerca de RD$ 300.00 la unidad de esa parte de dicho animal.
Otra ama de casa, la cual no quiso que se revelara su nombre, explica que existen diferentes opciones en sustitución de la carne, que bien puede ser res (vaca), salchicha, tayota con chuleta, albóndigas, fideos, espaguetis y hasta molondrón.
Hasta ahora, la libra de la carne de pollo se dispara entre 80 y hasta 100 pesos, de acuerdo a datos recogidos por N Digital, registrando una considerable alza a diferencia de hace varios meses cuando se vendía 55 y 65 pesos.
A esto se suma que en algunos establecimientos donde habitualmente se expende la carne de pollo no hay dicho alimento, de acuerdo a lo expresado por algunos de nuestros lectores.
Al respecto, el Gobierno informó que para contrarrestar el alza de los precios por la gran demanda del pollo, desde pasado el viernes empezaron a llegar al país las importaciones del ave, de un total de 50 contenedores que fueron adquiridos, lo que equivale a cerca de un millón de unidades.
El director del Inespre informó además que la unidad del pollo será vendido al público a 125 pesos a través de los puntos del Instituto Nacional de Estabilización de Precios (Inespre) y las bodegas móviles.
Pese a lo sucedido, el ministro de Agricultura, Limber Cruz, atribuyó el aumento de la demanda a principales factores como la apertura de la economía y el empleo, lo que disparó a un 15 por ciento el consumo, y al crecimiento “inesperado” del turismo.
