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Seuxis Paucias Hernández Solarte fue uno de los personajes más problemáticos para el Acuerdo de Paz con las Farc, principalmente porque fue capturado poco más de un año después acusado de narcotráfico y pedido en extradición a los Estados Unidos, la causa de su disidencia, tras firmar la Paz.
Jesús Santrich, durante su primer paso por la guerrilla de las Farc, se encargó de la propaganda del grupo y el relacionamiento, según Insightcrime, con el Gobierno de Venezuela como admirador y cercano al presidente Hugo Chávez. Pese a quedar ciego por síndrome de Leber, Santrich se convirtió en uno de los principales ideólogos del grupo a mediados de los 2000 y así llegó a la mesa de negociación de La Habana. Durante esa negociación se burló de las víctimas al responder “quizás, quizás, quizás” a la pregunta de si las Farc repararía a quienes resultaron afectados por sus acciones.
Tras firmar la paz, cuando se iba a posesionar en la Cámara de Representantes, en una de las 10 curules que se establecieron en el Acuerdo de Paz, el 9 de abril de 2018, Jesús Santrich fue detenido en su casa por la Fiscalía, debido a una orden de captura internacional con circular roja de Interpol, basada en un indictment del Gran Jurado de la Corte Federal del Distrito Sur de Nueva York.
De acuerdo con la acusación y la Fiscalía General de la Nación, Jesús Santrich, junto a Marlon Marín, Armando Gómez alias “el doctor” y Fabio Simón Younes Arboleda, planeó el envío desde junio de 2017 hasta abril de 2018 de 10 toneladas de cocaína a Estados Unidos.
Aunque el envío narcotraficante nunca se produjo y presuntamente, los miembros del cartel de Sinaloa que solicitaron el envío eran agentes encubiertos de la DEA, Santrich y los demás cómplices habrían llevado una maleta con cinco kilos de coca para aprobar el producto y proceder a su tráfico hacia el país norteamericano.
“Así mismo, la circular de Interpol indica que durante el curso de la operación de narcotráfico, los acusados manifestaron tener acceso a aviones registrados en Estados Unidos para transportar la droga y a laboratorios para suministrar la cocaína y, al efecto, proveyeron evidencia de su acceso a toneladas de cocaína, en el marco de un operativo de investigación, adelantado por agentes federales de la DEA y Fiscales Federales del Departamento de Justicia de ese país”, aseguró la Fiscalía en su momento.
Debido a que Santrich se encontraba en proceso de reincorporación a raíz del Acuerdo de Paz, la Sección de Revisión de la Jurisdicción Especial para la Paz decidió el 15 de mayo de 2019 que fuera dejado en libertad por la garantía de no extradición que le confería ese acuerdo.
La Fiscalía aceptó la decisión y mientras Santrich salía de la cárcel La Picota en Bogotá el 17 de mayo, acarreado en una silla de ruedas, fue abordado nuevamente por agentes del CTI que hicieron efectiva, antes de recobrar completamente su libertad, una nueva orden de captura en su contra por nuevas pruebas que había obtenido el ente investigador, tras la declaración de Marlon Marín en Estados Unidos.
No fue mucho el tiempo que Santrich estuvo nuevamente tras las rejas. La JEP y la Fiscalía sostenían un conflicto de competencias porque la jurisdicción especial no tenía sustento para demostrar la fecha de comisión de los delitos (antes o después del Acuerdo de Paz) y la Fiscalía estaba segura que ocurrió después de noviembre de 2016 y no estaba cubierto por esa amnistía.
El 29 de mayo de 2019, la Corte Suprema de Justicia finalmente ordenó la libertad de Santrich al considerar que era un aforado constitucional por su calidad de representante a la Cámara, y era ese órgano el que debía juzgarlo.
Su caso fue un duro golpe a la Justicia Especial de Paz, en especial por lo que ocurrió después. Tras obtener su libertad, Santrich viajó a Tierra Grata, donde se ubica una ETCR de las ex Farc, abandonó su esquema de seguridad y desapareció.
En agosto de 2019 reapareció en compañía de exjefes de las antiguas Farc, como Iván Márquez, Romaña, alias El Paisa, y otros líderes que anunciaron la creación de la “Segunda Marquetalia”. Como miembro de ese grupo guerrillero, después de enviar amenazas y señalamientos contra periodistas y políticos nacionales, Santrich habría muerto a los 55 años de edad en enfrentamientos en territorio venezolano.
Los senadores Antonio Sanguino, Roy Barreras y Gustavo Petro, sostuvieron en un debate en el Senado de la República, que el caso de narcotráfico de Jesús Santrich fue un montaje para afectar el Acuerdo de Paz, durante la Fiscalía de Néstor Humberto Martínez. Según ellos no hubo prueba vinculante del exguerrillero con el plan y Marín y Gómez España colaboraban con la DEA antes de ser capturados en el supuesto plan criminal.
El pasado 13 de mayo, la Corte Suprema de Justicia de Colombia aprobó la extradición a los Estados Unidos del comandante de las disidencias de las FARC, Seuxis Paucias Hernández, alias ‘Jesús Santrich’, por el delito de narcotráfico, dos años después de su fuga y cinco días antes de ser asesinado.