La compañía estadounidense Stratolaunch Systems Corporation, creada por el difunto cofundador de Microsoft, Paul Allen, ha anunciado este jueves que completó con éxito un segundo vuelo de prueba del avión más grande jamás construido bautizado como ‘Roc’.
“El vuelo de hoy, en la primera revisión, ha parecido extremadamente exitoso”, aseguró a los periodistas el director de operaciones de Stratolaunch, Zachary Krevor, explicando que se completó el proceso sin novedades y que están “muy satisfechos” con el estado de la aeronave al aterrizar.
El ‘Roc’ despegó aproximadamente a las 10:30 de la mañana hasta alcanzar una altura de poco más de tres kilómetros sobre el desierto de Mojave, en California (EE.UU.). En las imágenes difundidas por la empresa se puede ver a la gigantesca aeronave aterrizar en el aeródromo tras un vuelo de tres horas y 14 minutos.
La prueba fue diseñada para revisar el manejo de la presurización de la cabina y probar sus características de seguridad, además de algunas actualizaciones de ‘hardware’ desde su último vuelo realizado en 2019. “La tripulación hizo un excelente trabajo al hacer que el avión aterrizara de acuerdo con nuestros procedimientos de viento cruzado”, señaló Krevor.
El avión más grande del mundo cuenta con dos fuselajes gemelos de 72 metros, seis grandes motores turbohélice y una envergadura de 117 metros. Tiene una superficie equivalente a un campo de fútbol y constituye un récord en la historia de la aviación.
Además, se planea que la nave sirva como una plataforma de lanzamiento de vehículos hipersónicos desarrollados por Stratolaunch: Talon-A, de 8,5 metros de largo y 2.722 kilogramos de peso, capaz de alcanzar Mach 6, o seis velocidades de sonido; o Talon Z, todavía en desarrollo. Está previsto que en las pruebas del próximo año se demuestre que el avión es capaz de alcanzar las condiciones de vuelo requeridas para dejar caer un Talon-A.
RT