La médico transgénero Rachel Levine, nominada por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, como subsecretaria de Sanidad, fue confirmada este miércoles por el Senado del país, en una ratificación histórica.
Levine fue refrendada en el puesto con 52 votos a favor y 48 en contra: todos los demócratas e independientes de la Cámara Alta apoyaron su nominación, junto con el respaldo de dos legisladores republicanos.
Con su confirmación se convierte en la funcionaria federal de mayor rango abiertamente transgenéro de Estados Unidos.
Hasta ahora, esta pediatra de profesión había ejercido como secretaria de Sanidad de Pensilvania desde 2017, donde ha dirigido la respuesta de ese estado a la pandemia, sin dejar de ser blanco de numerosos ataques tránsfobos.
Desde su nuevo puesto, Levine trabajará a las órdenes del secretario de Sanidad y Servicios Humanos (HHS, en inglés) del país, el latino Xavier Becerra, y tendrá que supervisar oficinas y programas de este departamento, diez sucursales regionales y el despacho del Cirujano General, entre otros.
Biden está marcando un cambio de tono respecto al Gobierno del expresidente Donald Trump (2017-2021) en lo que respecta a la inclusión de personas transgénero, a las que ha hecho referencia en sus discursos.
El mandatario eligió para liderar el Departamento de Transporte al exalcalde Pete Buttigieg, que es la primera persona del colectivo LGTBQ con un cargo en el gabinete de Gobierno.
Graduada en Harvard y en la Escuela Médica Tulane, Levine es presidenta de la Asociación de Funcionarios de Salud Estatales y de Territorios, y profesora de Pediatría y Psicología en la Facultad de Medicina de la Universidad Estatal de Pensilvania.
Ha escrito en el pasado sobre la crisis de los opiáceos en EE.UU., la marihuana con fines médicos, medicina para adolescentes y para LGTBQ, además de sobre desórdenes alimentarios.
EFE