Madrid dará la bienvenida a 2021 en una Nochevieja atípica por la pandemia del coronavirus, con la Puerta del Sol vacía por la prohibición de celebrar las campanadas en la calle, sin la carrera popular de San Silvestre y sin fiestas de cotillón.
La imagen que esta Nochevieja retransmitirán las televisiones, de una Puerta del Sol vacía cuando suenen las doce campanadas del reloj de la Real Casa de Correos, será insólita desde que hace más de un siglo comenzó la tradición de tomar allí las uvas de la suerte.
Ni la mal llamada gripe española de 1918 ni la Guerra Civil impidieron esta costumbre.
Sin embargo, con la pandemia del coronavirus la Comunidad de Madrid ha prohibido la celebración de las campanadas en la calle, incluyendo la Puerta del Sol.
La plaza ya ha sido cerrada al público la noche del 30 de diciembre para evitar la concentración de gente en las ‘preuvas’ que desde hace años congregan a miles de personas para celebrar la Nochevieja por adelantado.
Para ello, agentes de la policía han organizado un doble perímetro en la zona con un primer control en el entorno de la Gran Vía y de la calle Alcalá, además del habitual de la Puerta del Sol.
En torno a las 21.30 horas los policías han impedido el acceso a la plaza y media hora después ésta ha quedado desierta al ser totalmente desalojada.
Este mismo procedimiento se repetirá el 31 de diciembre, por lo que no habrá gente en la Puerta del Sol durante las campanadas.
Minutos antes de dar la bienvenida a 2021 habrá una actuación del músico Nacho Cano en la plaza como parte de un homenaje a las víctimas de coronavirus, pero sin público.
Otro ritual de Nochevieja perdido por la pandemia es la celebración de la carrera popular San Silvestre Vallecana por las calles de Madrid.
La profesional se disputará a “puerta cerrada” en las amplias avenidas colindantes a la Ciudad Deportiva del Rayo Vallecano y estará acotada a la élite y a corredores con tiempos inferiores a 34 minutos en 10 kilómetros para los hombres y 40 minutos para las mujeres.
Esta Nochevieja tampoco habrá fiestas de cotillón en la Comunidad de Madrid debido al cierre de discotecas y bares de copas, que con motivo de la pandemia tan sólo pueden operar como establecimientos de hostelería y con horario limitado, hasta las 00.00 horas.
La asociación Noche Madrid calcula 55 millones de pérdidas esta Nochevieja, en la que apenas 500 locales de ocio de la región de más de 2.500 abrirán por la tarde el último día del año, lo que supondrá un descenso considerable en la clientela (de 1.200.000 madrileños y turistas a alrededor de 100.000 personas).
Durante la Nochevieja continúan en vigor en la región medidas para tratar de frenar la expansión del coronavirus, como el cierre de la Comunidad de Madrid (hasta el 6 de enero) o el toque de queda nocturno, que la noche del 31 de diciembre al 1 de enero se amplía de 1.30 a 6.00 horas.
En cambio, las restricciones de movilidad en diez zonas básicas de la región dejarán de aplicarse el 31 de diciembre y 1 y 6 de enero.
Fuente: EFE