SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Muchas veces tener cierta condición sumerge a las personas en depresión y tienden a limitarse en la vida. Pero el caso de Lorena Rincón Santos, una niña de 14 años, es todo lo contrario, a pesar de sus obstáculos es un ejemplo de superación y motivación .
Soñadora, inteligente, creativa y decidida son las cualidades que definen a Lorena, quien al nacer, sufrió muchas dificultades que ha tenido que enfrentar toda su vida. “Yo escribo, yo estoy en octavo curso, escribo, pinto, todo yo lo hago con mis pies”, explica la jovencita.
“Nació con su asfixie y pensábamos que no se salvaba, para mi Lorena no se iba a salvar, lo que me puso muy triste, pero gracias a dios ahí tenemos a Lorena”, dijo su abuela, la señora Minerva Montero Cordero.
Según la pediatra de Lorena, Esperanza Esquea Guerrero, el problema empezó debido a una falta de oxígeno en el cerebro, lo que le produjo grandes complicaciones en su período neonatal, estuvo en coma varios días y presentó convulsiones que le provocaron una parálisis cerebral.
“Esta parálisis ha producido en ella un gran aumento del tono muscular que se irradia en espasticidad y contractura principalmente a nivel de las manos, por lo cual Lorena no puede mover sus manos”, explicó.
Aunque la vida de Lorena se vio delicada desde sus inicios, y su futuro no era muy prometedor, porque en los casos de parálisis cerebral dependiendo de la gravedad se especula una corta vida, sorprendentemente Lorena hoy goza de una buena salud, y su condición la motiva a aprender cada día más.
Se ha convertido en toda una líder entre sus amigos e incluso ayuda a dar masajes con sus pies a los demás jóvenes en terapia.
Es tanta su valentía y disposición, que anhelaba con tener un poco de privacidad, pues ella y su hermano compartían la misma habitación, y al ver la promoción de un concurso que cumplía sueños, decidió enviar la historia de su vida y efectivamente cumplieron con sus sueños de tener una casa y su propia habitación.
Ahora tiene dos sueños más: es escribir un libro y hacer una carrera universitaria porque ella quiere ser útil a la sociedad.
“Yo quiero con ese libro enseñarles a algunas personas que por su discapacidad uno no se puede vencer “, indicó.
Sin embargo, su familia tiene algunas preocupaciones, y una de ellas son sus estudios. El colegio al que asiste sólo llega hasta octavo grado y por el momento no se sabe cuál será el futuro de su formación académica.
Actualmente el único tratamiento que lleva es la fisioterapia y toma un relajante muscular para las contracciones, pero por el momento no necesita de tratamientos especiales, ya que no padece de ninguna deficiencia ni enfermedad, incluso tiene un coeficiente intelectual normal.
